El Banco de España podría cambiar el modelo de subasta de las cajas nacionalizadas

Ayer mismo el consejero delegado de Novagalicia, César González-Bueno, insinuaba un cambio de rumbo en los planes del supervisor, explicando que el Banco de España optaría a partir de ahora por maximizar el valor de venta de las entidades en lugar de premiar las operaciones que permitan al Estado desprenderse de esas entidades cuanto antes y a cualquier precio. Se evitaría así, dijo, malvender las entidades del FROB . El Banco de España, en todo caso, rechaza que los procesos de venta se hayan hecho con esa inteción. «Nuestro objetivo sigue siendo sacarlas a la venta en cuanto se pueda» , decía recientemente el surgobernador, Fernando Restoy, insinuando que se esperará a que haya un interés real por parte de inversores y bancos.

La intención de la vieja caja gallega es sanearse a través del banco malo y con la ayuda europea, todo ello antes del próximo 31 de diciembre, y que se le clasifique como «banco puente» . Entonces dispondría de entre tres y cinco años para encontrar inversores privados que la privaticen. El presidente de la entidad, José María Castellano, asegura que los inversores interesados en NCG Banco ya le han confirmado que estudiarían su entrada en la entidad cuando se despejen todas las dudas sobre la reforma financiera y se cierre el proceso.

El Gobierno no estaría dispuesto a alargar demasiado en el tiempo la solución para estas entidades, a fin de evitar que queden resquicios de incertidumbre en el mapa bancario español. En este sentido, y según fuentes del sector, la gran banca del país propuso al supervisor un proceso de subasta «simultánea y concertada».

Por este proceso, el Banco de España sacaría a la venta todas las entidades nacionalizadas a la vez solo entre los grupos sanos . Estos presentarían sus ofertas, en función de su interés en cada una —por motivos, por ejemplo, de completar su red en una región— y el supervisor entregaría cada entidad débil al mejor postor. De esta forma, aseguran desde el sector, se aceleraría el proceso y al mismo tiempo se maximizaría el precio de venta.

En todo caso, previamente a su venta, y antes del próximo 31 de diciembre, esas cuatro entidades ya nacionalizadas tendrán que traspasar sus activos tóxicos al banco malo —la Sareb— y recibir la inyección de dinero público procedente de Bruselas para recapitalizarse. Entonces se considerarían parcialmente saneadas y se iniciaría su proceso de venta para que el FROB pueda salir de su capital en un plazo máximo de cinco años. A esos cuatro bancos y cajas podrían, no obstante, sumarse posteriormente algunas de las entidades a las que la consultora Oliver Wyman detectó un déficit de capital , como Banco Popular, Ibercaja, Liberbank, Caja 3, Caja España-Duero y BMN.