Nadal reclama energía

En su estreno, el balear se contagió de la Caja Mágica y se deshizo de Steve Johnsnon sin demasiado esfuerzo , un 6-4, 6-3 expeditivo en hora y cuarto. Nadal busca sensaciones y de ahí que cierre el puño después de cada punto sin la necesidad de que sea una maravilla. Cuestión de confianza, celebrar cosas para crecer y transmitir su pasión a la gente.

Y la de Madrid se desvive por él. El miércoles se llenó la Manolo Santana a la hora de la merienda y se espera que el personal también acuda en masa para su segunda cita en el Mutua Madrid Open. Además, es la principal atracción y más después de la prematura despedida de Roger Federer , que perdió contra Nick Kyrgios.

El suizo viajaba por la misma parte del cuadro que la de Nadal, pero está prohibido pensar en el mañana. Toca centrarse en el jueves y en recuperar el toque. «Hoy he jugado de menos a más pero en los tres últimos juegos he conseguido que la bola intermedia haga daño. A veces, por nerviosismo esa bola de crucero no la consigo y debo conseguir que no la puedan atacar. Eso me ha faltado en Barcelona, allí no hacía daño a mi rival y eso es vital para mi juego», decía tras la victoria.

El primer paso ya está dado y Nadal promete volver. «Este año es más irregular de lo que a mí me gustaría, pero lo acepto e intento trabajar día a día para coger la regularidad y confianza. Estoy convencido que las cosas saldrán bien. No tengo ningún motivo para que no la salgan. El juego no lo he perdido, no se me ha olvidado jugar en estos seis meses, tarde o temprano recuperaré la calma».

Además, el jueves ofrece un duelo español entre David Ferrer y Fernando Verdasco, mientras que Nick Kyrgios, desde ya la sensación de esta edición, se mide a otro sacador gigantesco como John Isner.