El Barça regresa con todo por hacer

Primero porque no hay dorsales libres y segundo porque el fair play financiero de la patronal lo impide hasta que se libere la masa salarial necesaria para ello. El centrocampista marfileño y el central danés llegan con la carta de libertad después de haber cumplido su contrato con el Milan y el Chelsea, respectivamente, y se han comprometido hasta el 30 de junio de 2026.

No serán las únicas caras nuevas con las que Laporta pretende ilusionar a la afición y Xavi pelear por títulos. Hay un acuerdo con Lewandowski, aunque grandes diferencias con el Bayern (el Barça ofrece 40 millones por el polaco y los alemanes exigen 60), al igual que con Marcos Alonso y Azpilicueta. También interesan Bernardo Silva (City) y el sevillista Koundé. Altas pretensiones y escaso dinero, aunque el presidente asegure de forma extraoficial que podrán destinar 200 millones a nuevas incorporaciones.

Entre ellas también estaría Raphinha, aunque el extremo del Leeds está en manos de Dembélé, que ya sin contrato continua dejándose querer y sin una oferta que le satisfaga. El Barça le ha propuesto colocarle en el mismo escalón salarial que a Ansu Fati, que marca el límite.

Para cumplir todas estas expectativas, el club necesita aligerar su nómina pero pocos futbolistas parecen priorizar su futuro deportivo al económico. Xavi ya le comunicó a Riqui Puig y a Neto, ambos con un año más de contrato, que no contaba con ellos y les dio una semana más de fiesta para que solventen su futuro. Medida que ambos han decidido obviar y presentarse a los primeros entrenamientos, este lunes. Un claro mensaje sobre las pocas intenciones de cambiar de aires. Más receptivos han estado Samuel Umtiti y Oscar Mingueza.

El central francés, con cuatro años más de contrato, ha llegado a un acuerdo con el Rennes para salir cedido, aunque ambos clubes están en negociaciones para ver cómo se reparten la ficha (14 millones de euros). Un caso similar al de Lenglet, muy cerca del Tottenham siempre y cuando el Barça acepte pagar siete de los 12 millones que percibe anualmente el galo. Mingueza estaría cerca del Monza de Berlusconi, recién ascendido a la Serie A.

Trincao (con tres años más de contrato) y Pjanic (firmado hasta 204), que regresan tras sus respectivas cesiones, también han sido invitados a abandonar el club, al igual que Braithwaite, tasado en 8 millones de euros. De todas formas, el caso más peculiar es el de Frenkie de Jong, empujado a salir al United para cuadrar cuentas y al que Laporta califica ahora de intransferible