El Villarreal golea y abraza el liderato

Sendos goles en esos momentos que se subrayan como psicológicos y la pérdida del mando progresivo local definieron el primer acto entre el Villarreal y el Zurich. Estaba el partido tierno sobre el césped de El Madrigal cuando los de Marcelino diseñaron una jugada combinada marca de la casa, de ese fútbol combinativo y alegre que identifica a los castellonenses, que finalizó con la asistencia de Gerard Moreno a Cani. Con la tranquilidad de la ventaja, mantuvieron la intensidad, el ritmo, pero sobre todo el juego. Tuvieron oportunidad para ampliar el marcador sin que Juan Carlos se sintiese apurado.

Al Zurich, líder de la liga suiza, le gusta manejar el balón, jugar la pelota y darle chispa a los partidos, aunque empezó cerrándose en el estadio villarrealense. Resta, quizá, la diferencia de calidad. El caso es que el conjunto de Urs Meier percibió una bajada de tensión local. Perdieron progresivamente el pulso los locales. El partido se igualó y el peligro comenzó a llegar a la portería de Juan Carlos, que finalmente, a dos minutos del descanso, tuvo que recoger el balón del interior de su red. Yapi Yapo sacó una falta en el centro del campo y Chikahaoui acomodó el balón ante la pasividad defensiva villarrealense y centró cruzado para que rematase en el segundo palo Schonbachler.

La cara de Marcelino invitaba a pensar que la charla en el vestuario no sería tibia. Arengó a los suyos. Se notó. El Villarreal regresó con la ambición del inicio de partido. Volvió a combinar, a buscar la velocidad en la transición, a que corriese el balón y a que los futbolistas de calidad empujasen al Zurich hacia su área. Especialmente activo y brillante se mantuvo Gerard Moreno. Gran partido del joven futbolista. Llegaron tres minutos definitivos para que los de Marcelino apuntalasen el partido. En el 57, una alianza mágica entre Gerard y Espinosa acabó con el balón franco para que Luciano Vietto anotase el 2-1. A la hora de partido, Bruno Soriano brilló en un libre directo. Zurdazo magistral que se fue a la escuadra.

Imponente el Villarreal, sin bajar el ritmo, sin dar opción alguna al equipo suizo a levantarse de los dos latigazos, arreó a por el cuarto. Y llegó. Giovani dos Santos condujo una jugada en velocidad hacia dentro del área y acribilló a Da Costa.