«Quedan duelos con Schleck»

—¿Las victorias anteriores en el Tour fueron más psicológicas y ésta, más física?

—Todos los Tours son difíciles. He hecho una carrera más económica, mirando los esfuerzos y vigilando a los rivales más peligrosos.

—¿En qué ha cambiado desde que ganó el Tour 2007?

—Las piernas me duelen igual. La de 2007 fue una victoria especial e inesperada. Ese Contador sigue igual, pero con más experiencia.

—Ha encadenado cinco grandes vueltas invicto. Domina.

—Detrás de todas mis victorias hay mucho trabajo. Corro poco, pero siempre estoy en concentraciones.

—¿Temió perder el Tour durante la contrarreloj?

—Confiaba en mí, pero lo he pasado mal. He llegado a darlo por perdido.

—Al entrar en la meta, preguntaba por el tiempo. ¿No tenía referencias?

—La radio no funcionaba y en la carretera no escuchaba el megáfono.

—¿Ha sido su peor día?

—Esto no son matemáticas. Igual este año no he llegado en el mejor momento. Ha habido días malos, como el de hoy, tras pasar la noche con dolor de estómago.

—Schleck ha vuelto a ser segundo, pero más cerca. ¿Ha mejorado él o ha empeorado usted?

—Sé la mentalidad que tiene Andy. Él ha estado al mismo nivel que en 2009 y quizá yo no he estado al mío, pero quedan muchos duelos con él.

—Ha sido un Tour polémico por las caídas, las esperas, la salida de cadena de Schleck...

—Son normas no escritas que se aplican según la situación.

—¿Correrá la Vuelta?

—Ahora quiero descansar, pero lo más probable es que no.