¿Por qué Lorenzo Brown juega el Eurobasket con España?

Lorenzo Brown (32 años, 1,96 metros) puede presumir de ser uno de los artífices del inesperado éxito español. El base estadounidense se ha convertido, contra todo pronóstico, en uno de los pilares de esta selección gracias a su capacidad ofensiva y el liderazgo que ha demostrado en momentos importantes: ante Lituania acabó con 28 puntos, 12 de ellos en la prórroga, y en las semifinales ante Alemania, el equipo anfitrión, fue una de las estrellas del equipo con 29 puntos y 6 asistencias.

Lo ha hecho en el que es su primer campeonato de selecciones, pues, hasta hace apenas unos meses, el jugador ni siquiera contaba con la nacionalidad española. El estadounidense fue nacionalizado de manera 'exprés' justo antes del Eurobasket, una decisión que, una vez anunciada, causó mucho revuelo en el entorno del baloncesto. Pero ¿por qué Lorenzo Brown juega con España?

La FIBA contempla en sus bases la posibilidad de que en las filas de cada Selección pueda competir un jugador nacionalizado ‒más de la mitad de las selecciones participantes en este Eurobasket han contado con uno en sus filas‒. Aunque España ha jugado muchos años sin hacer uso de esta cláusula, la ausencia de Ricky Rubio y la renuncia de Sergio Rodríguez convirtieron a Lorenzo Brown, nacido en Estados Unidos, en el nacionalizado elegido por Sergio Scariolo para este Eurobasket.

Aunque no es la primera vez que vemos a un jugador no nacido en nuestro país vestirse con la camiseta de la Selección ‒Wayne Brabender, Clifford Luyk, Serge Ibaka o Nikola Mirotic son algunos de los más sonados‒, lo cierto es que el caso de Lorenzo Brown resulta paradigmático: no cuenta con ningún tipo de relación con España. Y es que, mientras que otros jugadores nacionalizados han sido deportistas formados en nuestro país o, en su defecto, con algún tipo de relación con España, Lorenzo Brown ni siquiera ha jugado en el territorio nacional antes de este Eurobasket 2022.

Las nacionalizaciones de jugadores son procedimientos cada vez más recurrentes para mejorar el rendimiento deportivo de un equipo. Sin embargo, en muchas ocasiones, los elegidos no tienen arraigo alguno con el país.

Este es el caso de Lorenzo, cuya nacionalización 'exprés' fue aprobada por el Consejo de Ministros el pasado mes de julio después de que el Consejo Superior de Deportes decidiera presentar la petición, por demanda del seleccionador español, Sergio Scariolo.

El pasaporte español de Brown fue otorgado gracias a una prerrogativa del Gobierno español, que tiene la potestad de otorgar la nacionalidad española «por carta de naturaleza» a cualquier ciudadano no nacido en suelo español si atiende a los «intereses nacionales».

Su anunciada nacionalización, no sentó bien en ciertos sectores del baloncesto, que criticaron fervientemente que se eligiera a un jugador sin conexión frente a la rica cantera de jugadores jóvenes con la que cuenta España. De hecho, la Asociación de baloncestistas profesionales (ABP) se mostró en completo desacuerdo con esta decisión, asegurando que «el mensaje que se hace llegar a los jugadores nacionales es muy nocivo y tiene un impacto negativo tanto sobre el presente como sobre el futuro».

«¿Es creíble que la actual selección campeona del mundo no encuentre jugadores españoles con los que competir en las citas de máximo nivel internacional?», se preguntaban desde la organización.

A estas críticas se sumaron también otros grandes nombres del baloncesto español, que no se tomaron nada bien que la nacionalización de un jugador sin ningún tipo de relación con España. Es el caso del español Dani Pérez, base del BAXI Manresa y jugador recurrente de las listas de Scariolo para las Ventanas FIBA, que tachó de «lamentable» esta decisión.

A pesar de ello, Lorenzo Brown no es el único jugador que ha decidido nacionalizarse con otra bandera distinta de cara a los torneos internacionales de baloncesto sin tener ningún arraigo. Es el caso también de la estrella de la NBA Joel Embiid que, aunque decidió no estar disponible de cara a este Eurobasket, sí podría formar parte del 'roster' de Francia de cara al próximo Mundial de 2023 y los JJOO de París en 2024. También son sonados los ejemplos de Mike Tobey (Eslovenia), Shane Larkin (Turquía), Tyler Dorsey (Grecia) o Thad McFadden (Georgia).