La 'copa', un gran éxito de la NBA que engorda los récords de LeBron James

Eso ha cambiado las últimas semanas. La NBA se ha inventado una 'copa' -el nombre oficial es Torneo de Temporada-, un experimento que ha salido muy bien. Y que ha servido, además, para que LeBron James, a sus casi 39 años y en su 21ª temporada en la NBA, engorde todavía más su palmarés.

La final se jugó este sábado, en la madrugada de ayer en España, y enfrentó a Los Ángeles Lakers de James y a Indiana Pacers, un equipo en crecimiento liderado por Tyrese Halliburton, a quien la 'copa' le ha consolidado como estrella de la NBA. Los Lakers se llevaron el título gracias a un Anthony Davis excelso, con 41 puntos, 20 rebotes y 5 asistencias. Davis, con unas condiciones para dominar el baloncesto pero un rendimiento irregular, cuajó este fin de semana uno de los mejores partidos de su carrera y avivó las esperanzas en Los Ángeles, donde los Lakers han tenido un inicio de temporada con dudas, de pelear por el anillo en junio. El propio LeBron -24 puntos, 11 rebotes, 4 asistencias- y, sobre todo, Austin Reaves, que tenía gripe y metió 22 puntos en menos de trece minutos de juego solo en la primera parte, también fueron clave en la victoria.

El torneo fue en un principio recibido con escepticismo en EE.UU. Aquí podía parecer una extravagancia de baloncesto estilo FIBA, con una fase de grupos en la que se desempataba por diferencia de puntos en los marcadores y con unos 'playoff' a un solo partido. Pero para el final de la fase de grupos, la 'copa' había conseguido conquistar mucha atención y se notaba en la intensidad de los partidos. Los equipos se lo tomaron en serio y sus estrellas pasaron muchos minutos en la cancha: Nikola Jokic, Kevin Durant, Giannis Antetokounmpo o Luka Doncic peleaban por el aliciente de ser los primeros en levantar este trofeo.

Ese honor se lo llevó LeBron James, que se volcó en la competición, en una carrera consigo mismo por acumular el máximo número de distinciones y récords y postularse como el mejor de todos los tiempos. Tiene cuatro campeonatos de la NBA, cuatro MVP de la temporada, 19 participaciones en el All-Star y el año pasado superó a Kareem Abdul-Jabbar como el máximo anotador histórico, algo que en su día pareció imposible. James anotó 31 puntos en el partido de cuartos de final contra Phoenix Suns y otros 30 contra New Orleans Pelicans en semis.

Otra victoria más para James: las semifinales y la final se concentraron en Las Vegas, una ciudad donde la NBA tiene interés en abrir una nueva franquicia y donde James tiene interés en ser parte del accionariado. «Lo siento, esto no incluye una nueva franquicia», bromeó Adam Silver, el comisionado de la NBA, cuando entregó a James el título de MVP de la primera 'copa', otro trofeo más.

La colocación del torneo en el calendario tenía algunas ventajas. A estas alturas, la temporada de béisbol ha acabado y, para cuando se jugaron los 'playoffs', también los partidos de la liga regular del fútbol americano universitario. Eso sí, la 'copa' ha tenido que competir con la versión profesional del deporte rey de EE.UU.: la NFL acapara buena parte de la atención en el otoño e invierno. Con todo, la audiencia ha respondido a la 'copa': durante la fase de grupos, fue un 26% superior a los partidos en esas mismas semanas de la liga regular del año pasado; los cuartos de final entre Lakers y Suns tuvieron una audiencia un 89% superior al partido del mismo día del año pasado; y las semifinales contra los Pelicans fueron el partido más visto desde el comienzo de esta liga.

Esto es un éxito fenomenal para Silver, gran defensor de la 'copa'. La NBA está a punto de negociar una nueva ronda de derechos televisivos y este torneo de mitad de temporada es un activo adicional que podrá vender. Ya hay rumores de que Netflix está interesado en retransmitir partidos de la 'copa' a través de su plataforma.

Silver incluso se plantea hacer una 'copa' más grande, con 'playoffs' con más participantes y moverla al mes de enero, donde hay menos partidos de NFL (ya estarán en su fase final). Otro de los cambios podría ser el diseño que se ha hecho de los parqués, muy novedoso, con mucha mancha de color, que ayudaba a distinguir al espectador despistado los partidos de 'copa' de los de liga, pero cuyas virtudes estéticas y prácticas -ha habido quejas de resbalones- han sido discutidas. Es una de las pocas pegas de un torneo que ha nacido para quedarse.