Croacia hace trabajar a España

La mala es que, a poco más de una semana de la competición, a la selección de Orenga se le presume un problema que empieza a preocupar: el tiro exterior. Ante el colosal juego interior de la selección, la respuesta de los rivales empieza a ser cerrarse cerca del aro y que los Gasol e Ibaka se encuentren a más de un defensor cada uno. Ahí España necesita que sus exteriores decidan y ejecuten la teoría de la manta corta: si te tapas por dentro, te desnudas por fuera. No te puedes cubrir en los dos sitios a la vez.

El problema es que hasta ahora taparse por dentro funciona más de lo deseable ante la selección. En Badalona, Croacia colapsó por momentos el ataque del equipo de Orenga. Los balcánicos demostraron que son un equipo más que serio y dejaron buenas sensaciones en el Olímpico de Badalona: primero intentaron que el culé Tomic mandase por dentro, pero amparados en un inicio inspiradísimo de Bojan Bogdanovic, se hicieron fuertes en el tiro exterior en la primera mitad. Se marcharon con dos puntos de ventaja al primer cuarto, la misma que tenían tras el segundo. A esas alturas, España y Croacia habían metido cinco triples cada una, solo que unos habían necesitado 19 intentos y otros, nueve. Los locales estaban muriendo por la línea de tres.

La combinación de centímetros, velocidad y tiro exterior de los jugadores croatas, notables en lo físico, siguió complicando a España al inicio de la segunda parte. En la primera, Juan Antonio Orenga utilizó una rotación bastante corta que dejó, por ejemplo, a Sergio Rodríguez en el banquillo. El canario salió a la pista en el tercer cuarto y con un poco de criterio, un poco de tiro exterior y un poco de chispa, cambió la cara de España. La progresión fue suficiente para que la selección saliese del tercer periodo con ocho puntos de ventaja.

El equipo nacional encontró su camino pese a no anotar ni un solo triple en el tercer cuarto. No hizo falta: el ritmo de los exteriores empezó a conseguir faltas por un lado y oportunidades para los pívots por otro. Destacaron un buen Navarro y Pau Gasol, con 16 puntos entre los dos en el tercer periodo. Al siguiente, España abusó en defensa de de una Croacia exhausta –solo anotaron siete puntos en todo el último cuarto– que tardó poco en sacar a los menos habituales. La ventaja final fue de 18 puntos a favor de España, un poco engañosa tras el desarollo del partido, pero una señal positiva para la selección. Mañana la subcampeona olímpica tendrá la penúltima prueba ante una Ucrania más débil (20.30 horas, TDP), la recta final de la cuenta atrás hasta el inicio de la Copa del Mundo.