No es país para luchadoras

La última en hacerse un nombre en la lucha libre asiática ha sido Vinesh Phogat , quien se convirtió en 2018 en la primera mujer india en ganar el oro en unos Juegos de la Mancomunidad y en unos J uegos de Asia . Este triunfo le sirvió, entre otras cosas, para optar a un Premio Laureus . En la antesala a la gala de Mónaco , Vinesh contó a ABC su historia: «El lugar de donde vengo es muy conservador. Las niñas son obligadas a casarse antes de cumplir 16 años y no pueden ser deportistas. Si eres un niño, tienes que estudiar, encontrar un buen trabajo y, entonces, casarte. Si eres una mujer, eso no es una opción. Son maneras muy diferentes de crecer. El hecho de que mi familia se dedicara a la lucha libre es la razón por la que yo he podido dedicarme a ello», narra.

Su tío y entrenador, Mahavir, fue quien la introdujo en la lucha libre , aunque en el caso de Vinesh no fue algo que ella se propusiera, sino que surgió de repente: «Nunca tuve la oportunidad de pensar en dedicarme al deporte. Mi tío es un entrenador de lucha muy importante en mi país y un día me dijo que me iba a enseñar a pelear. Cuando terminé de entrenar, me dijo que volviera al día siguiente. Entonces iba al colegio y tenía que ir con él cuando salía de clase». Así empezó la historia de Vinesh en la lucha.

Sin embargo, ser descendiente de una estrella como lo es su tío no impidió que sufriera la cruel realidad del lugar donde nació. Balali se encuentra en el estado de Haryana , uno de los lugares donde más prevalece la desigualdad de género , el feticidio femenino y el matrimonio infantil. «Era un lugar tan conservador que a las mujeres no nos dejaban ir en pantalones cortos a entrenar. Los vecinos le decían a mi madre: “¿Por qué le dejas llevar pantalones cortos? Ella no debería vestir así, debería llevar pantalones largos”. Le decían que no me dejara hacer esas cosas. Yo pensaba: ¿Por qué un chico puede llevar pantalones cortos y yo no? Este tipo de cosas son las que pasaron durante mi infancia, así es como yo crecí mientras intentaba hacer deporte. Ser luchadora en la India es muy difícil si eres mujer» .

En cambio, según afirma, las cosas ahora son diferentes: «Nos casábamos temprano y servíamos a los hombres, pero hoy, cuando vestimos chándales y nos metemos en zapatillas, los hombres de nuestros pueblos no se sorprenden». Un pequeño paso. «He conseguido éxitos importantes en la lucha libre y ser reconocida. La gente parece empezar a entender qué se necesita para conseguir estos éxitos, pero inicialmente, cuando empecé, esto no era así».

Vinesh es la protagonista de un relato que casi nunca tiene el final feliz que ella sí está disfrutando. Ella logró abrirse paso en la lucha por su talento, pero las cosas no siempre salen como una sueña, y menos si nace en la India. «Mi pueblo solía ser un sitio donde la gente quería que un hombre creciera. Las familias no solían estar muy felices cuando nacía una hija. Ahora, creo que en parte gracias a lo que hemos conseguido en la lucha, se acepta que nos dediquemos a ello. Cuando vuelvo me encuentro con muchas niñas que me conocen y me dicen que quieren ser deportistas por mí», relata esperanzada.

Esta luchadora no solo se ha convertido en un icono en su país y en un ejemplo para todas las mujeres, sino que es también un paradigma de superación . Después de un triste 2016 en el que una lesión le condicionó su participación en los Juegos, regresó a lo más alto en 2018. «Me siento orgullosa y feliz de haber vuelto. Creo que después de todo lo que pasé, del sufrimiento en los Juegos, he vuelto más fuerte. Ha sido una lucha para mí y he vuelto con más confianza en mí misma. Ahora miro hacia el futuro y pienso que en los siguientes Juegos podré conseguir lo que en Río no pude. Estoy entrenando con la vista puesta en Tokio 2020 ».

Su gran vuelta le ha valido la nominación al Premios Laureus a «Mejor Regreso» , galardón que finalmente se llevó el golfista estadounidense Tiger Woods . Aun así, el haber estado entre los candidatos es un gran logro para el deporte indio. «En nuestro país el deporte nacional es el críquet, pero la lucha libre está ganando importancia con figuras como la de Vinesh», cuenta a ABC un periodista del país. «En India es un ejemplo a seguir. Además, ha logrado una nominación a los Laureus después de muchos años sin que ningún indio lo consiguiera», añade.

Por último, Vinesh lanza un alegato en favor de la igualdad , una tarea aún pendiente en su país, uno de los lugares más hostiles para la mujer: «En India hay muchísimas barreras para las mujeres que quieren ser deportistas. Las cosas han mejorado, pero aún hay restricciones que los hombres no tienen. Las niñas tienen que creer en ellas mismas y luchar por lo que desean. Considero que nuestros éxitos han tenido un gran impacto en este lugar y ellas ahora sí creen que pueden conseguirlo».