Tour de Francia 2014
La fiesta de la alta montaña
En el día nacional de Francia, La Planche des Belles Filles será el primer final en alto duro de la carrera, una oportunidad para que Contador ataque a Nibali
d. vilares
Cuenta la leyenda que La Planche des Belles Filles, el segundo final en alto de este Tour de Francia, tomó su nombre en un homenaje trágico. En la Guerra de los Treinta Años, en el siglo XVII, las mujeres de un pueblo cercano a esta ... montaña se suicidaron en masa tirándose hacia un lago, una muerte preferible que la que les esperaba a manos de los suecos. Nadie sabe si es verdad, pero hay una estatua construida en el puerto que certifica el cuento en la memoria.
En el paso por esta cumbre seguirá descubriendo su verdad en la edición 101 del Tour. «Mañana –por hoy– empieza mi Tour», anunciaba Alberto Contador ayer tras el final de etapa en Mulhouse. Nunca se había subido el Tour La Planche hasta hace dos años, cuando el Sky hizo una de sus mayores exhibiciones en la carrera.
Fue una subida a un ritmo alto y sostenido que fue limando el grupo de favoritos con un goteo constante, como en una maratón. Richie Porte le dejó el relevo a Chris Froome, que, entonces supeditado a Wiggins, seleccionó la carrera en los últimos kilómetros y además ganó la etapa.
Solo se ha llegado una vez a La Planche en el Tour y ganó Chris FroomeHoy los colores serán muy distintos. El azul más que oscuro del Sky dejará paso al fluor que el Tinkoff-Saxo lleva en su maillot este año. Nibali, que ya no es maillot amarillo por la fuga de ayer de Tony Gallopin, mantiene 2:34 de ventaja con Alberto Contador, la distancia clave de este Tour. Habrá otros hombres rodeándoles (Valverde, Porte, Talansky, Pinot), pero el Tour parece reducido al uno contra uno.
La Planche des Belles Filles viene precedida de otros seis puertos de montaña, tres de ellos de primera: el Petit Ballon y el Platzerwasel, al inicio de la etapa, y el Col des Chevères, justo antes de la subida final. La última es corta, de seis kilómetros y con un respetable 8,5% de porcentaje medio; hay terreno para hacerla dura.
Todo esto en el día de la fiesta nacional de Francia, el 14 de julio, un día que garantiza la presencia de ataques de los ciclistas del país. Hace nueve años que un francés no gana en la festividad nacional. Al menos hoy Gallopin vivirá la jornada como el maillot amarillo; quizás que mantenga el 1:34 que le separa de Nibali en general pueda considerarse como una pequeña victoria para el ciclismo francés.
La fiesta de la alta montaña
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete