Isabel & Alfredo Alquilizan: y la nave va en el MUSAC

La tercera, en la Sala 2, trae una revisión que abarca más de 30 años de la obra de Y. Z. Kami, prestigioso artista bien posicionado en el mercado internacional, que poco se ha visto por aquí: pintura basada en el 'sfumato' y una iconografía pseudo-religiosa, impecables pero fríos 'collages', junto a alguna instalación aislada; todo de indudable virtuosismo técnico pero al cabo poco convincente, a pesar de llegar avalado por la todopoderosa firma Gagosian.

En medio del conjunto, sin embargo, se destaca con mucho la que será una sorpresa para el visitante, pues de la mano de Kristine Guzman llegan unos artistas desconocidos para el público de nuestro país, incluso el especializado. La pareja artística formada por Isabel Aquilzan Gaudinez (Manila, 1965) y Alfredo Juan Aquilizan (Cagayan, 1962), lo es también en la vida privada, padres de cinco hijos. Habiendo emigrado de su tierra natal a Australia, han hecho de este desplazamiento forzoso y del esfuerzo por lograr una conciliación familiar efectiva una suerte de metodología que organiza sus proyectos.

En ellos cooperan con las comunidades migrantes de los lugares donde exponen, invitándolas a participar aportando materiales, objetos y pertenencias privadas para sus obras. El resultado se formaliza en instalaciones complejas, a partir de cientos, miles de enseres reciclados traídos por sus dueños, que aportan así capas de significado inesperadas, relatos añadidos, memoria y múltiples biografías a la obra. El núcleo de participantes se amplía a diversos colectivos, organizaciones y ONG's, al núcleo familiar, e incluso al personal del museo.

Desdibujando los límites de la autoría, los Aquilizan nos muestran el enorme potencial de la intrahistoria, ese substrato reprimido desde la articulación de los discursos por la institución museística. De hecho, con tan sólo esas dos obras con que cuenta su exposición leonesa consiguen arrastrarnos a un mundo prácticamente inagotable de ficciones, unas dentro de otras, sugerentes, melancólicas, arrebatadoras, a veces divertidísimas, por momentos trágicas…

Isabel y Alfredo Alquilizan

'Proyecto otro país: ese espacio intermedio'. MUSAC. León. Avda. Reyes Leones, 24. Comisaria: Kristine Guzman. Hasta el 6 de noviembre

Para ello, toda esa montaña de cachivaches heterogéneos se ha organizado siguiendo la silueta de un monumental navío: una nave de locos a la deriva, un descenso al Maelström que anuncia ya su destrozo contra las rocas del fondo del torbellino, una almoneda flotante, los restos de una gigantesca patera naufragada, cualquiera de esas balsas de plásticos y basura que flotan por las zonas muertas de los océanos, un museo de lo cotidiano sobre las aguas, quizá como soñara Aldo Rosi un día… Y rodeándolo por completo, una línea de horizonte, bella pero anodina, donde el cielo y el mar se juntan en 337 postales sacadas de internet, en un anonimato absoluto.