ARTE
Gordillo, obsesión y mutabilidad
PINTURA
El pintor sevillano comienza a hacer las paces con su ciudad natal en una muestra en el ICAS que desmenuza a sus tics creativos
'Hormigas', piezas del sevillano Luis Gordillo
El Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla, con la colaboración de la Fundación Luis Gordillo, ha encontrado en uno de los múltiples ámbitos que encierra el desacralizado convento de Santa Clara unos dignos espacios donde exhibir una propuesta expositiva temporal ... que manifiesta cierta vocación de permanencia. Las relaciones entre el artista y su ciudad natal no siempre han sido las mejores, plagadas de promesas y buenas intenciones institucionales quebradas, y habría que exigir a las autoridades culturales locales o autonómicas un mayor empeño para que el legado del artista, o al menos una parte, pudiera establecer residencia en la capital andaluza.
‘Manicromático’, título de la muestra, define a la perfección uno de los rasgos que determinan la personalidad creativa del pintor: una maniática obsesión. Obsesión que el creador ha desarrollado, desde sus inicios, por medir el valor de la actividad artística como recurso de auto-auscultación personal, ampliando estas inquietudes hacia la evaluación de la persistencia de la imagen, en cuanto que cuerpo o silueta, y la maleabilidad de las formas y el color.
Luis Gordillo 'Manicromático'
ICAS SEVILLA. c/ Chapineros 6. Comisario: Luis M. Montiel. Hasta el 11 de septiembre
Fue gracias a diversos procesos de multiplicación, réplica y seriación de la obra donde el andaluz encontró hace décadas un campo abonado para experimentar con dos variables muy reconocibles: la repetición y el cambio. Ambos conceptos, en apariencia antónimos cuando no paradigmáticos, se modulan mediante una tercera clave: la mutabilidad constante. Las transiciones morfo-cromáticas, sutiles en ocasiones, arriesgadas e inverosímiles las más de las veces, vienen articuladas por parámetros matemáticos.
Las posibilidades se han incrementado exponencialmente, hasta prácticamente llegar a lo ilimitado en cuanto a la recombinación formal y la invención de colores imposibles, con las técnicas digitales, que se rigen por patrones rigurosos pero en los cuales el creador ha sabido introducir un factor ineludible, el azar, aspecto este que suma encuentros sorprendentes y efectos inesperados.
Por medio de un número limitado pero trascendente de obras, ‘Manicromático’ permite al espectador reflexionar en torno a principios y fundamentos inherentes al lenguaje de Gordillo, que en esta ocasión ponen el acento en su interinfluencia con respecto al tratamiento del color. Desde las impresiones ‘offset’ de ‘Variaciones del Trio Gris y Vinagre’ (1977) o ‘Desarrollo del color de la imagen de Peter Sellers’ (1978), hasta llegar al reciente tríptico digital ‘Transmigración de las almas’ (2020), toda su producción destila una fuerza arrebatadora cuya pretensión no reside en hallar soluciones sino continuar planteando interrogantes indefinidamente.