Suscríbete a
ABC Cultural

de puertas adentro

Julio Falagán, con alma de chamarilero

Acepta que va poco por su estudio, que comparte con siete artistas más. Pero cuando lo hace, lo que toca es revolver, producir a toda máquina. Así es el taller de Julio Falagán

Julio Falagán, con alma de chamarilero ángel de antonio

javier díaz-guardiola

Cosas que nos descuadran antes de llegar: estamos subiendo a este espacio a través de un montacargas (sirva en defensa de sus dueños admitir que este redactor no tiene orientación ninguna y que no supo entender las indicaciones facilitadas para coger el ascensor del que ... hacen uso el resto de los mortales). Una vez arriba –y de entre todo lo que allí se acumula–, nos llama la atención una fotocopiadora: «No es lo único extraño que te puedes encontrar. Aquí trabajamos ocho artistas, por lo que en la parte de atrás parece que tenemos un taller de bicis. Y luego están mis maquinitas para jugar, mis juguetitos, lo que acumulo... ¡Pero no son cosas raras! ¡Son mis obras! ¡Para mí no hay nada extraño!»

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia