Panamá advierte a Sacyr de que tiene un plan B para el Canal

Como sucede casi a diario desde que a comienzos de enero el grupo de empresas comunicó su intención de suspender el proyecto si no se aprueba una inyección de liquidez que palie la situación surgida por unos sobrecostes superiores a 1.200 millones de euros, ambas organizaciones mantuvieron contactos telefónicos y se enviaron correos electrónicos durante todo el día. Pero, a cierre de la edición del diario, no se habían concretado avances.

Mientras tanto, el embajador panameño en España, Roberto Eduardo Arango, destacó en un acto organizado por «Executive Forum» en el hotel Palace de Madrid que confía en que las conversaciones «lleguen a buen fin», ya que existe una «buena disposición». Pero advirtió que aunque lo «más fácil y lógico» es que Sacyr e Impregilo terminen la construcción del tercer juego de esclusas, el Ejecutivo del país centroamericano dispone de un «plan B» con el fin de garantizar el «compromiso» contraído con «todos los panameños» y sus clientes para la finalización del proyecto en 2015.

«El Gobierno tiene que tomar las medidas para terminar las obras», apuntó el diplomático, preguntado por las informaciones que señalan a que la norteamericana Bechtel se posiciona para finalizar la construcción. Arango rechazó referirse a este caso en concreto y se limitó a subrayar que no tenía «conocimiento» de ello.

En el caso de que finalmente no se lograra un consenso (el plazo acababa esta madrugada, hora española), fuentes próximas al consorcio explican que esto no supondría la paralización inmediata del megaproyecto. GUPC podría prorrogar, de nuevo, la fecha límite, que en principio concluía el día 1 y fue extendida el viernes.

Los detalles del aún hipotético acuerdo no han trascendido, aunque hay constancia de que se basan en la propuesta de la aseguradora Zurich, que pasaría por lograr financiación por 400 millones de dólares y retrasar las devoluciones de los 780 millones de dólares de anticipos. Además, consorcio y autoridades panameñas se comprometerían a realizar una aportación conjunta. El optimismo de los dirigentes panameños impulsó las acciones de Sacyr en el parqué español, que se dispararon un 6,19%.