Félix Rodríguez de la Fuente y ABC: «Mis primeros pasos fueron con vosotros»

Aunque Félix nunca trabajó en el CSIC, llegó a ser el mayor divulgador científico de la historia de la Hispanidad, actividad esta que ahora el CSIC se preocupa mucho de potenciar. En varias ocasiones se ha indicado la calidad científica de los documentales de Rodríquez de la Fuente, llegando a hablarse incluso de las investigaciones que en ellos plasmaba: así lo señalaron pronto algunos de sus biógrafos, tales como Joaquín Araújo (1990) o Miguel Pou (1996). En el CSIC tuvo lugar la puesta en marcha de la Sociedad Española de Ornitología, de la que Rodríguez de la Fuente fue socio fundador en 1954 junto a afamados ornitólogos de la época tales como Francisco Bernis Madrazo.

En su haber hay también que señalar que la enciclopedia 'Fauna'. La obra, que él dirigió es, todavía, el libro de ciencias naturales en español más vendido de todos los tiempos. Este proceso de reconocimiento a su actividad científica que lo relaciona a nivel teórico con el CSIC, se vió culminado tras su fallecimiento con su nombramiento como Académico de Honor a Título Póstumo por parte de la Real Academia de Ciencias Veterinarias (RACVE) en 2007, su nombramiento de Colegiado de Honor a Título Póstumo por el Colegio de Veterinarios de Badajoz en 2010, pero sobre todo por la concesión del título de Doctor Honoris Causa en Ciencias Naturales por la Universidad de Burgos (UBU) In memoriam.

Abundando en la misma dirección, tuvo a bien la UBU publicar el pasado 2023, conmemoración del 95 aniversario del nacimiento de Rodríguez de la Fuente, mi estudio 'Félix: de la cetrería a la ciencia' en el que se recogen sus primeros estudios científicos en ornitología, que realizó de la mano de la cetrería.

A amar la naturaleza e interesarse por ella llegó por nacer donde nació, y de la mano de su labor como resucitador de la cetrería en nuestro país vino todo lo demás, pues lo insólito de la práctica y las raíces nobiliarias de la misma, le llevó a contactar con las élites de su época y, de ahí, a poderse introducir en el mundo de la prensa, la radio y finalmente la televisión. ABC fue testigo privilegiado de ello. Ya en 1955, Rodrigo de Burgos describió en un artículo a este «joven licenciado en Medicina» como todo un «maestro» cetrero. «Parecerá sorprendente, y hasta quizá lo sea, el que este médico, recién salido de las aulas universitarias, haya sentido la atracción de deporte tan ignorado», apuntaba el redactor antes de congratularse de que esa práctica tan noble y antigua tuviera en España un continuador. Rodríguez de la Fuente volvería a mostrar sus habilidades de cetrero apenas unos meses después en la Casa de Campo de Madrid, que se recogería en un reportaje en Blanco y Negro firmado por José Benito Sierra en 1958.

En efecto, sería también gracias a la cetrería como llegó a conocer el mundo del cine, concretamente en 1961, participando en el rodaje de 'El Cid' -película de los Estudios de Samuel Bronston rodada en Madrid- como asesor halconero de Sofía Loren y Charlton Heston. Es más: cada uno de sus halcones fue contratado como actor, lo que no solo le reportó beneficios, sino que hizo que estuviera tan cerca del rodaje que acabó deslumbrado por el cine.

La historia de cómo se fue abriendo paso Félix en este ámbito hasta llegar a ser el mejor documentalista español de todos los tiempos y a hacer 'El Hombre y la Tierra' lo contó magistralmente Miriam Salcedo en el primer estudio científico profundo dedicado a ello, su tesis doctoral titulada 'El documental de divulgación científica sobre la naturaleza: técnicas narrativo-dramáticas y retóricas empleadas por Félix Rodríguez de la Fuente en El Hombre y la Tierra', presentada en 2008 en la Universidad de Navarra.

En octubre de 1964 Félix organizó las primeras Jornadas Internacionales de Cetrería, concretamente en Loranca de Tajuña, provincia de Guadalajara. Su victoria en las mismas proporcionaría otro momento álgido de su relación con ABC: el diario le dedicaría su foto de portada del 21 de octubre con el título de «Cetrero Mayor del Reino», en la que apareció lanzando a Durandal, una hembra de halcón entrenada por él. En las mismas fechas sería invitado a un programa de la entonces joven Televisión Española: Félix entró en los estudios con un halcón en el puño enguantado y, aunque se trataba de una simple entrevista de tres minutos para explicar los rudimentos de la cetrería, demostró ante la audiencia sus amplísimos conocimientos con tal pasión y oratoria que, más tarde, el popular periodista Joaquín Soler Serrano pidió para él un puesto en la Real Academia Española por ser «el español de mejor prosodia». Así empezó a colaborar en el programa 'Fin de semana'. Así es como gracias a la cetrería entraría en la televisión y en la prensa. En TVE y en Diario ABC.

Ese mismo año el Gobierno español le encargó capturar dos halcones peregrinos y ofrecérselos como regalo al rey Saúd de Arabia Saudita, viajando a ese país para entregárselos. En parte gracias a este éxito diplomático, Félix seguiría su camino hacia 'El Hombre y la Tierra', introduciéndose en el reporterismo español colaborando con TVE en ' A toda Plana' (1964-1972). Poco después nacería Natura Films, productora de cine con la que jugaría un papel protagonista y con la que filmó 'Señores del espacio' (1965), programa que incluyó mejoras técnicas muy novedosas para la época y en la que conocería a Teodoro Roa, su entrañable y futuro colaborador que falleció a su lado en el trágico accidente aéreo que les arrebataría la vida. 1967 fue el año del estreno de 'Félix, el amigo de los animales' (1967-1968).

Ese mismo año también aceptaría el encargo de Guillermo Luca de Tena de escribir una serie de artículos sobre «La fauna ibérica» (1967) en la revista 'Blanco y Negro'. Rodríguez de la Fuente realizó quince reportajes en color en los que acercó el mundo animal a los lectores con tanto éxito que la publicación le propuso un reto aún mayor: la serie 'La fauna africana' (1968). El éxito de ventas marcó un camino le llevaría a cosechar no pocos éxitos en prensa escrita. Paralelamente, y gracias a su trabajo, se fueron produciendo cambios en la legislación española para proteger a las rapaces y a los lobos.

Poco después los éxitos de audiencia llevarían a comenzar en televisión 'Planeta Azul' (1970-1974), serie de más de 100 episodios en la que Rodríguez de la Fuente pretendería generar en la sociedad una nueva percepción del medio natural e inculcar en las nuevas generaciones un respeto profundo hacia la naturaleza, enseñando a los jóvenes algo de tanta actualidad como que si se atentaba contra la integridad del planeta, estaban atentando contra su propia vida y contra la de sus descendientes: «Estamos haciendo algo verdaderamente útil para la sociedad», solía decir Félix.

Y, por fin, un 4 de marzo de 1974 echaba a andar la emisión, con un primer capítulo rodado en Venezuela en el que el equipo sabía que «no solo había que rodar; era preciso también sobrevivir», tal y como se cuenta ya desde el principio del episodio. Le siguieron otros 123 capítulos más, todos ellos de naturaleza salvaje, dirigidos y presentados por el inolvidable Félix Rodríguez de la Fuente. Pronto se convirtió en líder de audiencia y llegándose a hacer tres series más: 'Fauna Venezolana' (1973-1974), 'Fauna Ibérica' (1973-1981) y 'Fauna Canadiense' (1979-1981).

'Fauna Ibérica' introdujo resultados de las investigaciones zoológicas y etológicas de Rodríguez de la Fuente, llevándose a cabo buena parte del trabajo de rodaje en la localidad alcarreña de Pelegrina. Hoy los parajes donde se rodó la serie constituyen el 'Parque Natural del Barranco del río Dulce', y el enclave 'Hoz del Pelegrina' ha sido presentado a UNESCO para ser considerado Patrimonio de la Humanidad.

Aurelio Pérez, Joaquín Araújo o Carlos Sanz fueron algunos de los colaboradores de Félix en tamaña aventura. Con una mínima preparación de los guiones, tirando del don natural de Rodríguez de la Fuente y su fascinante voz y haciendo uso de recursos lingüísticos como la evidencia, el símil, la alocución y la pregunta retórica. Las tres partes de 'El Hombre y la Tierra' alcanzaron los 1.984 metros de película emitida, superando la filmación completa de la obra los dos millones de metros. Para 1992, 52 naciones ya habían comprado algún capítulo de la serie, y se calcula que la ha visto una audiencia internacional de más de 1.700 millones de personas, llegando a situarse en Estados Unidos, en alguna ocasión, por encima de las producciones de Disney -en las que la espectacularidad superaba al rigor científico- y Cousteau -en las que ocurría lo contrario-. Entre 1975 y 1980 la serie española fue seguida semanalmente por unos 30 millones de espectadores patrios. Durante varios años fue líder en la programación, situándose entre los diez programas más vistos de la televisión.

En el ámbito nacional, en la década de los setenta, Rodríguez de la Fuente recibió diversos galardones por 'El Hombre y la Tierra': Premio Nacional de Televisión, Premio Ondas y Antena de Oro (1975), Premio de los Medios Audiovisuales (1975 y 1978), Los Mejores de la revista TP (1975) y Premio AVI (1976), entre otros. Fuera de nuestras fronteras obtuvo distinciones internacionales como La Gran Perla de Milán (1974), el Gran Premio de Montecarlo Príncipe Rainiero (1975), la Ninfa de Plata del Festival de Montecarlo (1976), Premio Colombel 'Claude Foussier' a la Qualité de la Vie de L'Academie des Sports de París (1977) y II Gran Premio de París de L'Emission Scientifique de Televisión del Centre Nacional de la Recherche (1977). En el año 2000, la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión Española (ATV) la eligió como la mejor producción de la historia televisiva en España.

Hasta 'La España Salvaje' (1996-2000), en la que intervino el entonces Príncipe Felipe como narrador, un documental de fauna española no volvió a ser líder de audiencia nacional.

'El hombre y Tierra' -cuyos episodios siguen siendo el máximo referente español del documentalismo sobre la naturaleza, y para ello fue decisivo el encuentro de Rodríguez de la Fuente con ABC. El propio Félix lo dijo públicamente poco antes de aquel fatídico accidente. Sería en 1980 cuando, agradecido por la oportunidad que en su día le brindara Guillermo Luca de Tena en 'Blanco y Negro', le dijo en una reunión: «Tú, director, fuiste el primero que creíste en mí… Mis primeros pasos fueron con vosotros».

Poco después de su fallecimiento. 'Blanco Negro' le dedicó un homenaje que ocupó decenas de páginas precedido de una cariñosa dedicatoria: «A ti, Félix, que luchaste por un mundo más coherente, más armonioso, más natural. A ti, Félix, que fuiste popular y respetado. A ti, Félix, que enterneciste a millones de españoles con tu trabajo. A ti, Félix... A ti».

SOBRE EL AUTOR

Alfonso Vicente Carrascosa Santiago

Científico en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, dependiente del CSIC