Suscribete a
ABC Premium

Por qué sonreír y fruncir el ceño es contagioso

En menos de un segundo somos capaces de imitar los gestos de otra persona y hacer nuestros sus sentimientos sin darnos cuenta

N. R. C.

Los humanos solo necesitamos una mirada y menos de un segundo, para captar el humor de nuestro interlocutor y hacerlo nuestro. Basta con fijarnos en su expresión facial para imitar su sonrisa o su cara de enfado. Se trata de una reacción automática e ... inconsciente que nos permite empatizar con el otro y con sus sentimientos.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia