Los astilleros de Portugal donde se fabrican las narcolanchas con destino a España

Tomás Guerreiro

Los mejores clientes de estos talleres del Alto Miño son colombianos y gallegos que podrían llegar a pagar hasta 250.000 euros por cada embarcación. Aprovechando un vacío legal, navegan desde la costa lusa hasta determinados puntos del Atlántico para recibir la droga y transportarla hasta la Península Ibérica