Hacer el testamento a golpe de «clic»

Esta web permite hacer un testamento cómodamente desde el sofá de casa sin necesidad de esperar colas y con la garantía de un asesoramiento profesional. La ventaja es que el procedimiento se simplifica gracias a las nuevas tecnologías, que permiten resolver todo el trámite sin complicaciones . «Por primera vez, todo el proceso se puede resolver de forma rápida y unificada: asesoramiento de un abogado colegiado, confección del testamento y firma ante notario», explica Carles Argemí, promotor del portal junto a Marc Remolà y Jaume Rocabert.

Además, el usuario puede firmar siempre en el notario más cercano al lugar donde se encuentre, según sus necesidades en cada momento. «Algunos de nuestros clientes viajan constantemente o son directores comerciales que cogen varios aviones cada semana, y entre vuelo y vuelo se deciden a hacer su testamento. Nosotros les concertamos cita con el notario de la ciudad y dirección que les vaya mejor», añade Argemí.

El funcionamiento es simple y se resume en tres pasos : 1) El usuario rellena un formulario con los detalles de su petición; 2) Un abogado prepara una propuesta personalizada, y 3) Se concierta una hora para la firma ante el notario más cercano al lugar indicado por el cliente. «El usuario sólo tiene que entrar en la web y en cuestión de unos minutos saldrá con el testamento resuelto. Rompemos una barrera que parecía infranqueable en España, ya que todo el proceso es rápido y sencillo, sin esperas, y los trámites se hacen online con la única excepción de la firma, que lógicamente se hace ante notario», añade Argemí.

También ofrece un servicio paralelo pensado para las personas con dificultades de movilidad. Se trata de «Testamento a domicilio» , un servicio que permite al usuario cumplimentar el proceso online y, al final, recibir la visita del notario en casa. «Algunos clientes iban a ser intervenidos quirúrgicamente y días antes de la operación han querido hacer testamento para quedarse más tranquilos», recuerda Argemí. «Otro caso habitual es el de parejas con hijos que tienen una hipoteca a medias y que prefieren dejarlo todo resuelto».