González ataca a ABC en el cierre de la campaña de Griñán por destapar los ERE

En su única participación en la campaña andaluza, González tiró de sal gorda ante sus paisanos: Javier Arenas «el lunes que viene, volverá a ser candidato..., ¿qué otra cosa puede hacer?». Y remarcó la idea de la ola conservadora en España: «quiero que Andalucía no sea la resistencia a la ola conservadora, sino a los reaccionarios del cambio “saltoatrás”, como dicen en América». «No dejemos que nos invada la bandera azul» en España. En su reaparición pública en un mitin del PSOE en sus horas más bajas y con los sondeos pronosticando de modo unánime una derrota, González sostuvo que en Andalucía se está jugando una «partida decisiva» para el futuro de España y espera que la región no caiga en la «trituradora del conservadurismo que nos quiere meter en la crisis durante diez años más».

«El PSOE está sufriendo un acoso mediático», recalcó delante de un Griñán que en su intervención no dejó pasar el balón centrado por González y que señaló que la «derecha ha puesto en liza a toda su artillería mediática». Sin embargo, no hubo autocrítica de Griñán, quien avanzó que aun en caso de una derrota electoral no prevé dimitir. «Echad a los corruptos», pidió a sus militantes el candidato socialista, que volvió a alentar el miedo a la derecha como único argumento para ganar en las elecciones de mañana. Como González, el candidato del PSOE a la Presidencia de la Junta apeló al «orgullo socialista» y la «verde y blanca», colores de la bandera de Andalucía, ante la «marea azul que inunda España».

Además, Griñán pidió el voto para su formación el próximo domingo para «salir de la crisis de otra manera».El candidato socialista argumentó que un gobierno del PSOE debe servir para que «no haya un salto atrás», ya que la solución a la crisis «no pasa por imponer una ideología reaccionaria y conservadora». Griñán acusó al PP de hacer una «política del fracaso» y «ocultar los Presupuestos Generales del Estado hasta el mismo día de las elecciones» para evitar su derrota.

Por su parte, el secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, echó mano del miedo al cambio en el electorado de izquierda: «El domingo no les déis las llaves de la sanidad y la educación pública a la derecha», dejó dicho en el mitin. Rubalcaba arengó a los convencidos con frases como «la crisis es su coartada de la derecha, porque lo que quiere hacer es un ajuste de cuentas con el Estado del Bienestar». El líder socialista se mostró confiado de «ganar el partido al final, pues hay muchos indecisos».