La hora de Ortega Cano
A las 12,30 se conocerá la sentencia por el accidente de tráfico que costó la vida de Carlos Parra
beatriz cortázar
La pasada noche el torero José Ortega Cano apenas habrá pegado ojo. Hoy, al mediodía, a eso de las 12,30 se conocerá la sentencia por el accidente de tráfico que costó la vida de Carlos Parra. A Ortega le pueden caer hasta cuatro años ... de cárcel además de una multa que los familares de la víctima quieren que supere el medio millón de euros. La defensa del diestro pide su libre absolución alegando que se trató de un accidente involuntario y el quid de este juicio está en saber si el juez admitirá el test de alcoholemia que le realizaron a Ortega y que dio positivo a pesar de la declaración del diestro asegurando que únicamente bebió media copa de cava y con la protesta de su defensa que considera que esa prueba no guardó la obligada cadena de custodia que requiere la ley para que sea tenida en cuenta.
Lo cierto es que desde hace dos años el torero espera la resolución de este caso que le ha tenido en todos los titulares y ha generado todo tipo de polémicas. Aunque en un primer momento se temió también por la vida de Ortega al final su increíble naturaleza y la impresionante labor de los médicos que le atendieron en el hospital de Sevilla lograron no sólo salvarle la vida sino dejarle apenas unas secuelas en su pie. En estos dos años el torero no sólo se ha sometido a varias operaciones y largos procesos de rehabilitación sino que también ha tenido tiempo para enamorarse y convertirse en padre de un bebé que nació el pasado febrero y que hoy es la gran alegría de su vida. «No ha habido día en todos estos meses que no haya pensado en la víctima y en su familia», ha declarado en distintas ocasiones el diestro a pesar de que los familiares de Parra le han recriminado que no ha pedido suficiente perdón por lo que pasó esa trágica noche de sábado cuando Ortega regresaba a su finca de Yerbabuena tras dejar a su hija Gloria en la casa de unos amigos y Parra circulaba por esa carretera con destino a su trabajo. Un accidente frontal sesgó la vida de este vecino de Castilblanco que deja viuda y dos hijos huérfanos y causó una conmoción total entre los vecinos de esa localidad donde era muy querido.
Desde entonces en el pueblo todos señalan a Ortega como causante de esa tragedia y han sido numerosos los testimonios de personas que han salido a los medios para hablar no precisamente bien del torero y de sus problemas con el alcohol. También en el juicio se han escuchado algunas de esas voces mientras los médicos que atendieron a Ortega en el lugar del siniestro insisten en que no presentaba síntomas de alcohol.
Apoyo familiar
Por todo lo que hoy se sabrá con ese fallo judicial es por lo que se entiende que esta noche habrá sido muy larga para Ortega. Sin separarse de su lado está su novia, Ana María Aldón, y su bebé José María, a quien el torero adora desde el minuto uno que lo tuvo en brazos. La paternidad en este momento de su vida era algo que jamás hubiera imaginado y de ahí que valore cada día que pasa con su hijo y su pareja, una mujer muy discreta que ha llevado la calma a la vida de un hombre que ha dado demasiados bandazos desde que enviudó de su mujer Rocío Jurado. Los problemas con su familia política, con sus propios hermanos y especialmente con su hijo José Fernando han sido el pan de cada día de todas las tertulias del corazón.
Cansado de estar siempre en el punto de mira hoy Ortega espera la resolución de ese juicio para empezar una nueva vida. De momento tiene que saber si ingresará en prisión como piden los familiares de la víctima o no. En aso afirmativo su idea es que su novia e hijo se queden a vivir en Sanlúcar con la familia de Ana María hasta que él cumpla su condena para después empezar una nueva vida que quiere sea lo más diferente a todos esos años de atrás. Mañana sabrá si ese día ya ha llegado.
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