El exjefe de la Casa del Rey: «El Rey realizó un gran trabajo en un escenario muy adverso»
Alberto Aza reflexiona sobre el loable papel del Rey Juan Carlos I en la creación de un Estado social y democrático, durante una conferencia de la London School of Economics
El exjefe de la Casa Real , Alberto Aza , calificó este jueves el papel del Rey Juan Carlos I como un icono de la reconciliación, unidad y estabilidad para España, durante una conferencia sobre la transición de la dictadura a la democracia, auspiciada por la London School of Economics en su sede de Ciencias Políticas en Covent Garden.
«El Rey realizó un gran trabajo en un escenario muy adverso desde el punto de vista económico y sobre todo político que ha resultado ser un éxito. El proceso de transición habrá finalizado cuando reine Felipe VI» , comentó el «fontanero de Suárez» , como se denominó así mismo Aza al comienzo de la sesión, en relación a su papel como jefe de gabinete de Adolfo Suárez.
La conferencia, que contó con la presencia del embajador español en Reino Unido, Federico Trillo , repasó algunos de los asuntos más espinosos a los que se enfrentó el país como los grupos de extrema izquierda, el GRAPO, o el terrorismo de ETA. Aza reconoció sentir rabia, duelo e impotencia cada vez que sonaba un teléfono en la Moncloa para informar de que habían asesinado a una nueva víctima.
Transición
Entre 1972 y 1976 las disensiones internas en los pilares de la banda, la amnistía de 1976 y los esfuerzos de las principales fuerzas políticas por distender la situación hicieron albergar esperanzas de paz. Pero a partir de 1977, cuando Aza se convierte en la mano derecha de Suárez, se abre una etapa especialmente cruenta de la banda, donde funcionarios de estado, policías y militares copan las listas de objetivos de ETA , haciendo tambalear los cimientos de la transición y creando un clima de excepción que propició la intentona golpista del 23 de febrero de 1981.
De nuevo, en aquel momento, la figura del Rey queda elogiada indiscutiblemente por su firmeza , templanza y buen hacer. Los diputados ensalzaron la actitud del monarca e incluso el entonces presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan, felicitó a Su Majestad por teléfono. Desde Londres y París, también celebraron su loable actuación.
El diplomático asturiano Aza además de ganarse la confianza de Suárez, convertido en su «fontanero», mantuvo la de Felipe González que lo nombró embajador de España en Reino Unido en 1992 para reclamar la soberanía de Gibraltar y la de José María Aznar que lo mantuvo en el cargo. Finalmente, logró que hasta Juan Carlos I encontrara en él el perfil ideal para ponerse al frente de la Casa de Su Majestad el Rey.
Tras una apasionante hora recorriendo este período fundamental para comprender la España actual, el propio Paul Preston, director del Centro Cañada Blanch de la LSE, y anfitrión de la conferencia inauguró el turno de preguntas con su interés sobre la creación del Estado de las Autonomías y ese café para todos servido en la etapa de la transición que evitó a corto plazo algunos problemas.
«La intención era satisfacer a las comunidades históricas y abrir una puerta para la descentralización del estado. El PSOE no supo contener la petición gallega de la vía rápida y ahí se engendró 'el café para todos'», concluyó Aza.
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