Las víctimas de delito podrán recurrir la concesión del tercer grado al preso

Entre otras novedades, se establece el derecho de reflexión que impedirá que las empresas de abogados puedan ponerse en contacto con las víctimas antes de que transcurra un mes del suceso, para ofrecer sus servicios.

La protección de las víctimas menores de edad también se amplía de manera que ya no será necesario que acudan a testificar en el juicio. Sus declaraciones serán grabadas y visionadas después durante el proceso. De manera general, en todos los delitos se evitará también el contacto entre la víctima y el infractor.

Según ha defendido el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, el objetivo de la reforma es que «la víctima no se sienta desasistida de la garantía de sus derechos cuando se dicte sentencia, que entendamos que la reparación del daño del delito no se cumple cuando se dicta la sanción o la pena sino que se hay que garantizar los derechos de la víctima todo el tiempo que dure la pena».