Elosúa reconoce que lo avisaron por teléfono de la detención del recaudador de ETA

Elosúa ha asegurado que en esa llamada, de unos ocho o diez minutos de duración, su interlocutor le dijo que «van a detener o retener a Cau en la frontera mañana a la tarde» . Se refiere a su amigo José Luis Cau, el recaudador de la banda terrorista ETA.

El dueño del Faisán, que se ha mostrado confuso y con dificultades para entender las preguntas del fiscal, recuerda que el hombre que le habló a través del móvil le dijo: «Ya sabes cómo están las cosas». Elosúa supuso que sería un policía, «por lo de retener a Cau». «Al principio me quedé abobado y pensé que sería una tomadura de pelo», ha recordado, «pero luego pensé que sería policía porque tengo el teléfono cogido (pinchado)».

El presidente de la sala, Alfonso Guevar a , ha tenido que reformular varias veces las preguntas del fiscal para intentar que Elosúa, de 78 años, respondiera con concreción. En varias ocasiones, el propietario del bar Faisán dio datos distintos a los declarados con anterioridad.

El fiscal le ha pedido que describa a la persona que le entrega el teléfono y que, según la acusación, sería el policía José María Ballesteros. El testimonio de Elosúa no cuadra exactamente con la fisonomía del agente . Dice que podía llevar «una peluca negra, chaqueta negra, pantalón negro, era de una estatura baja, chaparro, bajito, de 45 a 50 años y acento extremeño». Ballesteros estaba justo detrás de Elosúa, pero el fiscal no le ha preguntado si lo reconocía.

Respecto a las «nueve botellas de vino», nueve millones de pesetas de la extorsión a empresarios en el argot de ETA, Elosúa ha dicho que son de «vino de Rioja que había comprado» .