Economía descarta riesgos de deflación pero confía en que el BCE vigile los precios

El Ministerio de Economía confía en que la recuperación de la demanda interna mantenga la evolución de los precios en tasas positivas y que la inflación en España cierre el año en torno al 0,5%, frente al -0,2% registrado el pasado mes de marzo . El gabinete dirigido por Luis de Guindos espera en todo caso a que el Instituto Nacional de Estadística (INE) detalle la composición de esa última caída de los precios para examinar si se debe o no a la volatilidad estacional de algunos productos, como los carburantes.

«Hay efectos positivos en un escenario de baja inflación», ha dicho Latorre durante su comparecencia ante la comisión de Economía del Congreso de los Diputados, recordando que con precios bajos las familias mantienen su poder adquisitivo –más necesario en un tiempo de reducción salarial y de las rentas– y se puede proseguir con la moderación salarial y la mejora de la competitividad.

«En un contexto de unión monetaria debemos asegurar la estabilidad de precios», ha dicho el «número dos» del ministerio, que en todo caso ha admitido que esos niveles de inflación dificultan el proceso de desendeudamiento de la economía del país.

Y es que incluso dentro de las filas populares se llama al Gobierno y a las instituciones europeas a mantener una estrecha vigilancia sobre el Índice de Precios al Consumo (IPC). «Hay que estar muy pendientes de la evolución de los precios», ha dicho el diputado del PP, Vicente Martínez-Pujalte, a Latorre. «Un poquito más de inflación, siempre menos que en Alemania, sería el camino adecuado porque ayuda a desendeudarnos», ha explicado.

Al respecto, el secretario de Estado ha recordado que el Banco Central Europeo (BCE), como anunció Mario Draghi tras la última reunión del consejo de gobierno del supervisor comunitario, «está muy comprometido» con actuar en cuanto sea necesario y con medidas extraordinarios para mantener a raya el riesgo de deflación, teniendo en cuenta de que la inflación de la Eurozona, ahora mismo en el 0,5% , está lejos de su objetivo del 2%.

Latorre ha asegurado que, por otro lado, el Ejecutivo popular mantendrá su impulso reformista y plan de consolidación fiscal para afianzar la recuperación de la economía española. «El escenario económico es hoy muy distinto al de hace dos años: se han corregido los desequilibrios, se ha invertido la tendencia de las magnitudes macroeconómicas y se están cumpliendo los compromisos de consolidación fiscal», ha dicho, asegurando que eso ha permitido iniciar una «recuperación que tiene una base sólida». España, ha asegurado Latorre, «ha dejado de ser el problema del euro para ser la solución del mismo».

Por ello, y en línea con otros organismos , el Gobierno revisará al alza, hasta el 1%, su previsión de crecimiento del PIB para este año. Economía augura que incluso este año se producirá la ansiada recuperación del crédito, tal y como vienen anunciando también las propias entidades financieras . Latorre ha insistido en que las estadísticas del Banco de España ya indican que las operaciones nuevas de financiación a pymes y al consumo de los hogares están creciendo respecto al año pasado y ha augurado que la evolución de los préstamos nuevos será positiva al cierre de este ejercicio.

El ministerio considera que la banca, tras su saneamiento y reestructuración está ya en condiciones de prestar dinero a las empresas y las familias. «No hay restricción de la oferta de crédito, así que en la medida en que la calidad de demanda vaya aumentado se incrementará la concesión», ha explicado Latorre, quien ha avisado además de que el acceso de las empresas a vías de financiación distintas del crédito está también aumentando. «Se está reduciendo la dependencia bancaria», ha dicho.