El consorcio propone cofinanciar los 1.600 millones de sobrecoste del Canal de Pánama

Fuentes de la autoridad del Canal indicaron ayer en un comunicado que no reconocen la mediación de la Comisión Europea y han recalcado que «la solución al conflicto debe darse dentro de los mecanismos que indica el contrato firmado, y ninguno de ellos incluye la intervención de terceros».

La respuesta de la ACP ha llegado horas después de que el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Industria, Antonio Tajani, se comprometiera «personalmente» a «intentar buscar una solución diplomática» al conflicto. A través de un comunicado, explicó que en las últimas horas ha recibido «una petición del consorcio de empresas europeas que tienen una divergencia con las autoridades panameñas sobre el coste de la obra de expansión del Canal de Panamá para que intente mediar».

Tajani ha consdierado «positivo» que «varias empresas europeas del sector de la construcción, una española (Sacyr), una italiana (Salini Impregilo) y una belga (Jan de Nul) , que tienen un problema en el exterior soliciten a la Comisión Europea su mediación».

Por su parte, el consorcio ha ofrecido a la Autoridad del Canal cofinanciar los sobrecostes de la obra, alrededor de 1.600 millones, «mientras se espera la decisión sobre el contencioso del arbitraje internacional». En una nota publicada en Madrid, el GUPC recuerda que la obra da trabajo directo a 10.000 personas y que si no se llega a un acuerdo sobre su financiación no se terminará en los plazos previstos.

«No se trata de mediación»

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha querido introducir cierta dosis de claridad en la descripción de la situación, al recordar que, como habían dicho las autoridades panameñas, «si hablamos en términos jurídicos, no puede haber una mediación» que no está prevista en el contrato entre las empresas europeas y las autoridades panameñas.

Para Margallo, lo más importante ahora es encontrar financiación para poder terminar las obras y que para ello se está negociando con «autoridades financieras nacionales o internacionales que puedan resolver los problemas de liquidez» que tiene Sacyr a la vista de las dificultades sobrevenidas. En este campo es en el que la UE puede contribuir a las negociación.

Aunque no quiso desvelar ante qué instituciones se están haciendo esas «múltiples gestiones» ni confirmar que una de ellas podría ser el Banco Europeo de Inversiones (BEI), Margallo insistió en que lo esencial ahora es resolver la «falta de liquidez».