Diego Costa, el «9» de España

Diego Costa aún no ha marcado con España, asignatura pendiente para un atacante diferente. El equipo del toque infinito cambió de referencia en el área y emergió la figura de este jugador volcánico sin que saliera bien el experimento, una decepción tremenda por todo lo que supuso su llamada. El cuerpo técnico quiso premiar su apuesta por la bandera española, pero las cosas salieron fatal.

«Tengo ganas de volver empezar otra vez porque no fue lo esperado. Sé que no di el nivel que esperaban en el Mundial, no sólo el mío sino el equipo. Pasó lo que pasó y ahora hay que pasar página», comentó el martes a su llegada al hotel de concentración de la Ciudad del Fútbol, sincero porque no hay otra explicación que no sea esa.

Costa fue el delantero titular en los encuentros de Holanda y Chile, de infausto recuerdo. El hispanobrasileño jugó tan mal como el equipo y su alineación generó miles de comentarios ya que muchos creen que no llegó en condiciones para un torneo tan importante. De hecho, casi se queda fuera de la lista por esa repetida lesión muscular que le dejó fuera de combate en el final de Liga y en el decisivo duelo de la Champions contra el Madrid. Pero Del Bosque estaba convencido de que el «9» era él.

Y lo sigue siendo si se tiene en cuenta que para estos dos partidos (el jueves, amistoso contra Francia; el lunes 8, contra Macedonia en la fase de clasificación para la Eurocopa) compite con Paco Alcácer y Raúl García, dos de los debutantes que dan aire fresco a la nueva España.

«Es muy importante tener la confianza de Del Bosque para estar en una selección como España. Quiero hacer las cosas bien para continuar viniendo. Tengo pendiente marcar y jugar bien con España», admite Costa, que ya se ha ganado a la afición del Chelsea y a José Mourinho.

España, que en estos últimos años ha tenido abundancia en ataque, sufre ahora cierta distancia con el gol. Pero Costa insiste en que la competencia es importante, mencionando a futbolistas que ya han brillado con el combinado nacional. «Intentaré hacer las cosas bien. Sabemos que Torres, Villa o Negredo son grandes delanteros, alguno puede volver y también hay gente nueva que está entrando que puede aportar mucho. Yo intentaré aportar lo máximo con el deseo de que me salga bien».

De momento, tiene mucha mejor pinta. En el primer día después de la gran decepción, se le vio totalmente integrado. Fue de los más destacados del entrenamiento y se lució con alguna jugada brillante, especialmente bonito el tanto que le marcó a Casillas después de dejar atrás a la defensa. Falta que lo haga en un partido de verdad, como lo es el de París contra Francia. Porque ahí, tanto España como Costa, juegan mucho más que un amistoso. Es una cuestión de orgullo.