En pleno debate sobre la sostenibilidad de los servicios sociales básicos, los datos del presupuesto y las inversiones destinadas por los Ayuntamientos para la conservación y adecuación de los centros docentes revelan que los municipios gobernados por formaciones de izquierdas son los que menos dinero destinan a estas partidas.

De acuerdo con un informe técnico elaborado por la Conselleria de Educación al que ha tenido acceso ABC y que mide la inversión por habitante en este ámbito, los principales recortes se han producido en la localidad alicantina de Alcoy. En la anterior legislatura, en la que gobernaba el PP, se presupuestaron de media 200.000 euros para el mantenimiento ordinario de las infraestructuras educativas. En 2013, el gobierno municipal, formado por el PSPV y Esquerra Unida, destina 35.000 euros, lo que supone una inversión por habitante de 0,58 euros, la misma cifra que presupuesta el Ayuntamiento de Burjasot, en la provincia de Valencia, gobernado por un tripartito entre los socialistas, Esquerra Unida y Compromís.

En la parte baja de la horquilla se encuentra también el Consistorio de l’Eliana, cuyo alcalde, José María Ángel, del PSPV, gobierna gracias a un pacto con Esquerra Unida. En este caso, siempre de acuerdo con el informe de la Conselleria que mide el peso de la inversión respecto a la población del año 2012 con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), se destinan 0,77 euros per cápita. Otro caso similar es del Ontinyent (PSPV-EU-Bloc), con una inversión en materia de conservación y adecuación de centros docentes de 1,06 euros por habitante. En la Font de la Figuera, gobernada por los socialistas y Compromís, la cantidad se eleva a 1,35 euros.

En el lado contrario de la estadística elaborada por la Conselleria de Educación se sitúan el Ayuntamiento de Torrent, con 7,37 euros de inversión por habitante; el Consistorio de Carlet, con 6,54 euros; Sagunto (4,6 euros); y Alicante (2,99 euros); todos ellos gobernados por el Partido Popular.