Europa subió impuestos y metió la tijera en gasto, salarios y pensiones

Portugal, que ayer logró el aprobado de la troika a sus reformas y el desbloqueo de 14.900 millones de ayuda, también ha aplicado la tijera a conciencia. Su reforma laboral acaba con los puentes y reduce tres días las vacaciones y cuatro las fiestas. El despido se reduce de 30 a 20 días por año trabajado con un tope de 12 retribuciones. Además, el presupuesto para 2012 no esquiva ningún sacrificio: adiós a las pagas extras para funcionarios y pensionistas que ganen más de 1.000 euros, subida del IVA hasta el 23%, recortes en sanidad, transportes, administraciones...

Más promesas que realidades han incluido los programas comprometidos por Grecia en los últimos tres años. Con todo, el segundo rescate por 130.000 millones conllevará un duro ajuste que Bruselas promete vigilar al milímetro. Ayer mismo, el consejo de ministros heleno acordó recortar un 22% el salario mínimo. El Parlamento aprobó también ayer recortes en el gasto por 3.200 millones. A lo largo de la semana llegará la ratificación del resto de ajustes, que incluyen un mordisco de 383 millones a las pensiones. El Gobierno griego acordó también con la troika la reducción de 15.000 funcionarios este año, cifra que se disparará hasta 150.000 en 2015.

Irlanda también disparó impuestos, redujo el gasto público, aumentó el IVA, disparó las tasas educativas, rebajó el salario mínimo y subió la edad de jubilación. Un «kit» completo que le ha servido para atisbar señales de recuperación. Sin embargo, una vez hecho gran parte del esfuerzo, el Gobierno irlandés anunció ayer que convocará un referéndum sobre el nuevo Tratado para reforzar la disciplina fiscal en la eurozona,