El paciente con un corazón artificial murió por causas naturales

Eufemio García, el paciente que murió el pasado martes, solo un día después de haber sido presentado como el primer paciente catalán al que se le implantó un corazón artificial, falleció a causa de una sucesión de arritmias ventriculares malignas derivadas de su insuficiencia cardíaca.

Según ha comunicado hoy el hospital, los resultados de la autopsia, así como el análisis de los dispositivos implantados en el paciente -el citado corazón artificial y un desfibrilador- concluyen que no hubo ningún fallo mecánico. Tal y como ha explicado en rueda de prensa el jefe de la unidad de Insuficiencia Cardíaca del Hospital de Bellvitge, Nicolás Manito, la muerte de Eufemio fue por causas naturales y por una "casualidad".

El especialista ha relatado que el paciente sufrió una llamada "tormenta arrítmica", una sucesión de fuertes taquicardias, que no pudieron ser revertidas eléctricamente por el desfibrilador que tenía implantado desde el año 2009, dos años antes de recibir el corazón artificial.

"Ni el corazón artificial ni el desfibrilador fallaron", ha afirmado Manito, quien ha explicado que ante la intensidad y concatenación de arritmias el desfibrilador no podía dar más descargas. El doctor Manito ha recalcado que el hecho de presentar al paciente en rueda de prensa no tuvo incidencia alguna en su muerte. "Fue una casualidad", ha recalcado, al tiempo que subrayaba que aunque el paciente hubiese estado en el hospital, las arritmias podrían haber sido igualmente mortales.

"Esto ha sido un avance, no un fracaso, en un camino difícil", ha recalcado Manito, quien ha defendido la necesidad de utilizar estos corazones artificiales ante el descenso de donantes para transplantes.

Preguntado sobre el impago del corazón por parte de la Generalitat, Manito no ha querido entrar en detalles pero ha apuntado que "seguro que cobrarán".