Maragall afirma que no tiene conciencia de incumplir la ley con la tercera hora

10/10/2008 a las 08:32h.

«Señor conseller, no quiero ni imaginar qué le pasaría a un ciudadano normal que incumpliera de forma reiterada la ley como usted ha hecho con la tercera hora de castellano. La actitud de un representante público que obvia la legislación a sabiendas de que ... lo está haciendo tiene un nombre», espetó ayer el diputado de Ciutadans al conseller Ernest Maragall en comparecencia parlamentaria.

La respuesta del socialista fue la misma que dio el pasado julio cuando el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) emitió un auto que instaba a su departamento a «aplicar estrictamente» la tercera hora de castellano desde el primer día del presente curso. «No tengo conciencia de que esté vulnerando ninguna legislación», replicó Maragall, pese al explícito pronunciamiento judicial, y arguyó que «el Tribunal Constitucional (TC) todavía no se ha pronunciado respecto al conflicto». En cuanto al auto del alto tribunal catalán, Ernest Maragall aseguró que «estamos al día» porque la propia LOE permite la aplicación de la tercera hora en toda la etapa de primaria. La partida quedó de nuevo en tablas. Pese a ello, el diputado de Ciutadans no perdió la oportunidad de llamar de nuevo la atención al titular de Educación. «No hay discusión posible, no tiene más salida que cumplir lo que dicta el TSJC», dijo Robles dirigiéndose a Maragall y cerró su intervención afirmando: «Por cierto, señor conseller, sí que sé que le pasaría a un ciudadano que incumpliera la ley, que le enviarían los Mossos».

El tema lingüístico no fue el único que caldeó la comparencia de Maragall, el incumplimiento de las ratios máximas, que esta semana ha provocado la rebelión de varios centros en Badalona, fue otro punto central del debate. El conseller admitió por primera vez la realidad y afirmó que el 53% de los grupos escolares de Educación Primaria de Santa Coloma, el 38% de los de L´Hospitalet de Llobregat y el 22% de los de Badalona están por encima de los topes de alumnos por aula, fijados en los 25 estudiantes y que, en algunos casos, llegan incluso a los 32.

Maragall reconoció que «la situación no es la deseada» y admitió también que «los directores tienen la razón al reclamar que se formalicen correctamente las ratios». Dijo, asimismo, que el conflicto está ya resuelto. Del 1 de julio hasta entrado septiembre, Badalona recibió casi 800 alumnos nuevos -522 extranjeros-, de los cuales entre 30 y 40 estaban ayer sin plaza, aunque, según precisó Maragall, «la comisión de escolarización está reunida para resolver esta situación». En Santa Coloma, los nuevos alumnos son 486 -más de 300 extranjeros- y en L´Hospitalet los atendidos fuera de matrícula ascienden a 783, de los que 288 fueron asumidos por la concertada. Otro caso destacable es el de Salt (Girona), donde han llegado 170 alumnos, de los que 154 han ido a la concertada. PPC, Ciutadans, ICV y CiU criticaron la falta de planificación de la Generalitat por no prever esta situación.

Líderes en barracones El diputado popular, Rafael López, recordó al conseller que el curso ha arrancado con casi un millar de barracones, lo que convierte a Cataluña en la comunidad con más infraestructuras de estas características. López acusó a Maragall también de cumplir sólo con la mitad del pacto que se cerró respecto a plazas de educación infantil y de tirar adelante la LEC si el consenso social.