En vídeo: así ha sido el primer vuelo de la historia de un robot humanoide

El robot cuenta con cuatro potentes propulsores que le permiten ascender: dos montados en sus brazos y otros dos integrados en el jetpack que lleva en la espalda. Gracias a este sistema, el iRonCub MK3 logró elevarse unos 50 centímetros del suelo sin sufrir caídas.

El iRon Cub no es un modelo reciente; su diseño original data de 2009 y fue creado para realizar experimentos en inteligencia artificial. A lo largo de los años ha participado en numerosos proyectos a lo largo de los años. Ahora, su objetivo es explorar las capacidades de vuelo de los robots humanoides. El dispositivo mide aproximadamente un metro de altura y pesa 22 kilogramos, aunque el peso aumentó tras la incorporación de los propulsores.

Durante las pruebas de vuelo, iRonCub MK3 estuvo asegurado mediante un sistema de suspensión que evitó caídas y daños. Fue capaz de generar el empuje necesario para despegar, mantenerse estable en el aire y aterrizar con éxito, todo ello de forma autónoma, sin intervención humana directa.

Este logro puede representar un primer paso hacia el desarrollo de robots humanoides que combinen movilidad terrestre y aérea. Esto podría abrir nuevas oportunidades en áreas como el rescate o la inspección y exploración en entornos de difícil acceso. El equipo del IIT afirma en un estudio sobre el trabajo realizado en el robot planea seguir perfeccionando el dispositivo para conseguir realizar vuelos libres y más prolongados en el futuro.