Los dispositivos electrónicos se utilizan, entre otras muchas cosas, para almacenar todo tipo de información: desde fotos y vídeos hasta documentos, pasando por audios, mensajes y contactos. La parte negativa es que, en caso de estropearse o sufrir algún daño, todos estos datos ... pueden perderse para siempre, sin importar si eran muy útiles o constituían un recuerdo importante desde el punto de vista emocional. ¿Qué hacer entonces para que toda esta información no se pierda y, a la vez, liberar espacio en el soporte?
Como se explica en la página web del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), «las copias de seguridad son una forma de proteger la información guardada en el ordenador, móvil o tablet«. Para hacerlas hay que seleccionar los archivos más importantes y guardarlos en otro sitio, como un disco duro externo o un servicio de almacenamiento en la nube; algo que puede hacerse de dos modos:
- Si se hace de forma manual, será el propio usuario el que copie en otro soporte aquellos archivos que le parezca más importante.
- La otra opción es programar el dispositivo de modo que haga la copia de seguridad de manera automática cada equis tiempo.
Aun así, se elija la opción que se elija, desde INCIBE recomiendan hacer esta copia (o comprobar que se ha realizado) con frecuencia.
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