La principal fuente de ingresos de Twitter va de mal en peor desde la llegada de Elon Musk

A finales de la pasada semana, Omnicom, agencia de publicidad que representa a marcas como McDonald's, Apple y Pepsi, recomendó a las firmas a las que ofrece servicios que pausen sus inversiones en el sitio, según reportan varios medios estadounidenses. Algo similar a lo que hizo la agencia IPG (Coca-Cola, Nintendo, American Express, Johnson & Johnson, Mattel o Spotify) apenas unos días después de que Musk tomase el control de Twitter. Entre las compañías que han tomado la decisión de dejar de mostrar publicidad en la plataforma se encuentran nombres como Pfizer, General Motors, General Mills, Audi o Volkswagen.

Esta fuga de anunciantes ya fue reconocida por el propio Musk hace escasos días. Entonces, el ejecutivo compartía que los ingresos por publicidad estaban cayendo de «forma masiva». Y todo a pesar de los intentos del magnate por calmar los nervios de los anunciantes.

Desde el principio, los anunciantes se han mostrado preocupados por el hecho de que la llegada de Musk vaya a provocar que se relaje la moderación de contenido y la toxicidad aumente en Twitter. Precisamente, eso es lo que habría motivado que muchas empresas dejasen de anunciarse en la aplicación en los primeros días después de la llegada del magnate a la dirección.

«Tiene mucho sentido que los anunciantes se preocupen», explicaba recientemente en conversación con ABC Fernando Checa, experto en redes sociales y profesor de Comunicación en la Universidad Internacional de la Rioja (UNIR).

«Indudablemente, que los anunciantes paren sus inversiones, hace daño a la reputación de la red social», señalaba el experto, quien, además, remarcaba que, al final, «Twitter nunca ha sido una de las redes sociales que más anuncios ha tenido. La mayoría de las marcas suele inclinarse por sitios como Facebook, Instagram o, cada vez más, TikTok».

La salida de nuevos anunciantes se conoce apenas unas horas después de que Twitter se haya visto en la necesidad de pausar su nuevo servicio por suscripción Blue, que incluía el signo de verificación de cuenta para todos aquellos usuarios que estuviesen dispuestos a pagar 8 dólares al mes a la red social.

Precisamente, la gran cantidad de cuentas que suplantan la identidad de usuarios y empresas conocidas aprovechándose del signo de verificación ha sido una de las razones esgrimidas por Omnicom para recomendar a sus clientes que dejen de invertir dinero en la red social del pajarito.

Existe una «evidencia de que el riesgo para la seguridad de la marca de nuestros clientes ha aumentado considerablemente a un nivel que la mayoría consideraría inaceptable», compartía la agencia en un memorando a sus clientes al que han tenido acceso varios medios estadounidenses. En este también se hacía mención a los recientes recortes en personal en departamentos extremadamente sensibles, como son los equipos de seguridad y confianza. Asimismo, se llamaba la atención sobre la progresiva salida de altos ejecutivos de la empresa desde el momento en el que Musk tomó el control.