Mila, seudónimo de la menor, tiene 17 semanas de gestación y habría sufrido abusos sexuales desde los siete años por parte de su padastro. Según recogen varios medios peruanos, la menor avisó a su madre de que su pareja abusaba de ella, pero la progenitoria no hizo nada para ayudarla, es más, ella también afirma haber sido víctima del mismo agresor, quien la había amenazado de muerte. A día de hoy, el padrastro sigue en libertad pese revelarse el suceso.
Después de conocer la denuncia, la Unidad de Protección Especial de Loreto del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) solicitó al Hospital Regional de Loreto que la menor pudiera acceder al aborto terapéutico. No obstante, la junta médica negó el procedimiento.
El aborto en Perú está penado, pero hay una excepción si se hace por razones terapéuticas. En este caso, la mujer embarazada debe dar su consentimiento o su representante legal en caso de ser una menor, como lo es Mila. Su madre ya ha expresado que se le practique un aborto terapéutico a su hija, que entra dentro del rango permitido ya que se puede hasta las 22 semanas.
Sin embargo, el 3 de marzo la junta médica del hospital decidió que la menor continuase con su embarazo porque según aseguran «dentro del protocolo del aborto terapéutico no dice que sea para casos de violación».
Sólo entre enero y febrero de este año se registraron 8.381 casos de violencia contra niñas, niños y adolescentes, de esa cifra 33% fueron abusos sexuales. El 70% de las víctimas fueron niñas y adolescentes mujeres, según cifras del Ministerio de la Mujer.
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