McMahon, empresaria de 76 años, declaró ante el comité de educación del Senado a principios de febrero que «la excesiva consolidación del poder en el sistema educativo federal« estaba dañando la educación». ¿Cuál es el remedio? Financiar la libertad educativa, no el gobierno», añadió.
Cofundadora de la famosa liga de lucha libre WWE, McMahon trabajó en esa organización desde 1980 hasta 2009, ocupando los cargos de presidenta y directora ejecutiva.
También integró el gobierno del primer mandato de Trump (2017-2021) como directora de administración de pequeñas empresas. La amenaza de Trump de cerrar el departamento de Educación ha enfurecido a los demócratas, a los sindicatos de profesores y a muchos padres, que lo ven como un ataque al sistema educativo público.
«El pueblo estadounidense no quiere ver recortes en la educación y el consiguiente aumento de los impuestos a la propiedad. Pero ese es el peligro de confirmar a la señora McMahon», dijo el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer.
Los grupos conservadores, por su parte, defienden desde hace tiempo la propuesta de desmantelar el departamento de Educación para dar más control a las autoridades de cada estado. Aunque reconocen que será una tarea ardua. McMahon, gran donante del Partido Republicano, ha respaldado económicamente la carrera política de Trump desde 2016.
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