El elefante Sak Surin regresa a su Tailandia natal desde Sri Lanka tras sufrir malos tratos
Antes de devolverlo, el Gobierno esrilanqués se hizo cargo del animal al encontrarlo lleno de abscesos
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Iniciar sesiónUn elefante tailandés ha visto mejorar su perspectiva de vida gracias a un viaje a su tierra natal. El paquidermo ha regresado a su país de origen después de haber sido regalado a Sri Lanka, tras una querella diplomática entre ambos países a raíz ... de acusaciones de malos tratos.
Mathu Raja, de 29 años, conocido en su país natal con el nombre de Sak Surin, fue un regalo de las autoridades tailandesas a Sri Lanka en 2001. Sin embargo, en 2022 Bangkok reclamóle fuera devuelto a raíz de acusaciones de que el paquidermo había sido víctima de malos tratos en el templo budista del sur del país en el que vivía.
En noviembre de 2022, el Gobierno esrilanqués decidió hacerse cargo del animal, que estaba herido y cubierto de abscesos. Según varias asociaciones animalistas, el elefante habría sido maltratado y utilizado para transportar troncos.
A 29-year-old Thai elephant gifted to Sri Lanka two decades ago has been flown back to its birth country after a diplomatic spat over the animal's alleged mistreatment.
— AFP News Agency (@AFP) July 2, 2023
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Este domingo, el mamífero, de cuatro toneladas, embarcó en un avión en Colombo y llegó cinco horas después a Chiang Mai, en el oeste de Tailandia. Según las autoridades tailandesas, su traslado costó 700.000 dólares (unos 640.000 euros).
El elefante debería ser trasladado próximamente a una reserva natural cercana a Chiang Mai, donde guardará cuarentena. El viaje se desarrolló «perfectamente», según declaró el ministro tailandés de Medio Ambiente, Varawut Silpa-archa, que recibió al animal en el aeropuerto este domingo. «Su estado es normal», explicó.
El primer ministro de Sri Lanka, Dinesh Gunawardena, declaró en junio ante el Parlamento que se había disculpado personalmente ante el rey de Tailandia por los malos tratos que habría sufrido el elefante.
El Gobierno tailandés decidió dejar de enviar elefantes al extranjero y sus misiones diplomáticas suelen comprobar en qué condiciones viven los que ya fueron expedidos en el pasado.
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