Tres de los miembros de La Manada ya están en la Audiencia de Navarra para asistir a la vistilla que decidirá sobre su libertad

La vistilla está programada porque el próximo día 7 de julio se cumplen los dos años de prisión preventiva que prevé la Ley. A raíz del acto de hoy, la Sala Segunda de la Audiencia de Navarra, la misma que juzgó el caso, decidirá si prorroga la estancia en prisión de los condenados o les deja en libertad condicional hasta que la sentencia sea firme .

El abogado de cuatro de los acusados, Agustín Martínez Becerra, ha anunciado a la entrada del juzgado que «lo que sería ajustado a derecho sería la puesta en libertad, seguramente con una fianza ».

Según Becerra, para tomar la decisión sobre la permanencia en prisión de los condenados, el tribunal «debería tener en cuenta el propio contenido de la sentencia y el contenido de su auto». Considera que el riesgo de fuga se ha ido porque la pena a la que fueron condenados, 9 años, es inferior a la que se solicitaba durante la instrucción, un mínimo de 22 años y 10 meses. Respecto al riesgo de reiteración delictiva , el abogado ha asegurado que se trata de una «valoración subjetiva» del tribunal y que el hecho de que el otro caso en el que están implicados cuatro de los cinco miembros de La Manada, el de Pozoblanco , lleve casi dos años en instrucción, demuestra que ese peligro «carece de sentido».

En la vistilla que se está celebrando en la Audiencia de Navarra, los tres jueces que juzgaron los sucesos de la primera noche de los Sanfermines 2016, escucharán a todas las partes, a los abogados defensores de los sevillanos y a las acusaciones, tanto la acusación particular que representa a la joven madrileña como a las acusaciones populares que representan al Gobierno de Navarra y al Ayuntamiento de Pamplona. Los tres condenados que estarán presentes en la vistilla se limitarán a escuchar, ya que no tienen derecho al uso de la palabra .

Los primeros pedirán la puesta en libertad «inmediata» de los acusados, mientras que las acusaciones considerarán que deben permanecer en prisión por el riesgo de fuga precisamente porque ya hay sentencia y el riesgo de reiteración delictiva, puesto que están enfrascados en una segunda acusación de agresión sexual, la que se produjo en Pozoblanco (Córdoba) el 1 de mayo de 2016.

La vistilla durará en torno a la hora y media, aunque lo más probable es que la decisión final sobre la puesta en libertad o no de los condenados no se tome hoy, sino que salga mañana o pasado mañana.