Theresa May crea un cargo ministerial para luchar contra la soledad

Lo hace, además, siguiendo la recomendación de la diputada laborista Jo Cox, asesinada en 2016 por un ciudadano británico ultraderechista cuando hacía campaña por el «Remain» antes del referéndum sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea. «Debemos hacer todo lo que podamos para que, en memoria de Jo, trabajemos sobre este problema», señala la premier en el documento divulgado.

La parlamentaria abogaba por ayudar a este colectivo en el que se pueden encontrar casos como que la mitad de las personas de más de 75 años viven solas y muchos de ellos aseguran llegar a estar semanas, meses e incluso años sin hablar con nadie.

Por eso, la fundación Jo Cox ha mostrado su satisfacción por esta novedad. «Ella había vivido y observado la soledad a lo largo de su vida, le fue muy cercana sobre todo cuando tuvo que empezar la universidad en Cambridge y separarse de su hermana Kim».

May ha anunciado que será la Secretaria de Estado de Deportes y Sociedad Civil, Tracey Crouch , la que asuma este nuevo cargo ministerial.

«Un orgullo aceptar este desafío generacional», confirmaba la propia Crouch ante el reto que tiene por delante para intentar frenar este problema. Anunció, además, la colaboración con todos los partidos políticos del Parlamento británico para tener una visión más amplia sobre cómo está la situación y el diseño, por parte de la Oficina de Estadísticas Nacionales, de un método para medir los diferentes grados de soledad y sus consecuencias. Todo esto financiado por un fondo creado también por el propio Gobierno.

Muchos analistas achacan un crecimiento en este problema a los recortes en el presupuesto de las autoridades locales que conducen al cierre de bibliotecas y centros de día donde suelen acudir este tipo de personas. Varios informes aseguran que la soledad es tan perjudicial para la salud como fumar 15 cigarrillos al día y que precisamente el clima frío mezclado con esta lacra podría ser letal en estos momentos del invierno.

«Actos simples de compañía» pueden, según la directora de enfermería del Servicio de Salud Británico, Jane Cummings , marcar la diferencia y ayudar a solventar muchos de los casos de desamparo en los que viven estas personas.