El empleo y la emancipación lastran el desarrollo juvenil en España

En concreto, España ocupa el puesto 24 de la UE en el Índice de Desarrollo Juvenil Comparado 2017, con una puntuación de 4,83 . La media europea es del 5,97, mientras que el mejor país, Dinamarca, tiene una puntuación de 8,46. Sin embargo, en valores absolutos, España mejora con respecto a los valores de 2009, con unas 13 décimas por encima de la valoración que presentaba en plena crisis económica.

Según los investigadores, el trabajo es la gran losa con la que los jóvenes se encuentran para escalar en su nivel de desarrollo: aunque el índice muestra una curva ascendente que en todo caso no llega a niveles de 2009, la tasa global de empleo de esta población es del 34,5 %, frente a la media europea del 48,2 %, y la de temporalidad es del 56,4 %, mientras que la media europea no llega al 33 %.

Este indicador, además, tiene relación directa con la tasa de emancipación , según los investigadores, que presenta enormes diferencias entre países. Si en Francia el 81% de los jóvenes entre 25 y 29 años están emancipados, en España ese porcentaje se queda en el 38%. Un fenómeno compartido por los países del sur y el este de Europa y que, por tanto, responde también a factores culturales, modelos familiares y políticas públicas.

En este sentido, recalca el estudio, aunque la tasa de emancipación comenzó a caer en 2009 a la vez que caía la tasa de empleo, la recuperación de esta última no se ha traducido en que los jóvenes vuelvan a irse de casa de sus padres. «Se trata de un empleo tan precario que no resulta capaz de volver a impulsar la emancipación », resumen los investigadores del Centro Reina Sofía.

En comparación con el resto de los países europeos, los jóvenes españoles solo presentan mejores tasas en dos campos : vida (que mide valores como la tasa de fencundidad, mortalidad, suicidios o accidentes) y nuevas tecnologías (que mide tanto el acceso como las compentencias adquiridas).