El Senado rechaza una moción contra la violencia machista en el medio rural

Entre otras medidas, el PSOE proponía contribuir a la concienciación social sobre la violencia machista en las poblaciones rurales, mejorar la coordinación institucional, impulsar la capacitación de los profesionales, aumentar la seguridad de las víctimas, revitalizar la red de centros de la mujer y promover la aplicación efectiva de la ley integral de violencia de género.

En defensa de la moción, la senadora socialista Paula Fernández Pena ha indicado que el asesinato de Isabel Fuentes a manos de su pareja el pasado 8 de mayo en el Complejo Hospitalario de Ourense ha trasladado a los medios de comunicación «la realidad invisible y silenciosa» de la violencia de género en el medio rural.

Más de cinco millones de mujeres viven en pequeños municipios, ha apuntado Fernández Pena, quien ha indicado que la prevalencia de la violencia de género no presenta diferencias en función del entorno rural o urbano, aunque existen datos que indican que las mujeres de municipios pequeños tardan más tiempo en reconocerse maltratadas.

Las mujeres del medio rural se encuentran en una posición de mayor riesgo frente a la violencia de género por la situación de aislamiento, el déficit de servicios sociales, el control social y la estigmatización de las víctimas de este tipo de violencia, ha explicado la senadora.

La senadora del Partido Popular María del Carmen Dueñas ha planteado una enmienda de modificación que ha sido rechazada por el PSOE y ha expresado la voluntad de su grupo por «dar la batalla» todos juntos para erradicar la lacra de la violencia de género.

Dueñas ha subrayado que «nadie ha dicho que todo esté hecho», sino que entre todos se han conseguido avances en la lucha contra la violencia machista, al tiempo que ha asegurado que el Gobierno ha dado pasos firmes en la lucha contra esta lacra.

Ha dicho que el PSOE ha imposibilitado el acuerdo por afanarse en utilizar la lucha contra la violencia machista de manera «partidista» y le ha instado a dejar de hacerlo si quiere alcanzar un pacto de Estado en esta materia.

El senador del grupo mixto Jesús Enrique Iglesias ha compartido el contenido de la moción y ha defendido dos enmiendas de las que el PSOE solo ha admitido una para mejorar la formación de los asistentes sociales y el personal de atención domiciliaria.

Desde la Entesa, la senadora Mónica Almiñana ha expresado su apoyo a la moción socialista «harta» de las «palabras huecas» contra la violencia de género, al tiempo que ha reclamado al Estado recursos para combatir el terrorismo machista.

María Teresa Rivero, de CiU, ha mostrado su disposición para promover un pacto de Estado para luchar contra la violencia de género, pero ha censurado la «manía de querer vaciar las competencias de las comunidades y cambiar el sistema por la puerta de atrás».

En nombre del grupo vasco, María Eugenia Iparragirre, se ha mostrado de acuerdo con los aspectos generales de la moción, aunque ha expresado sus discrepancias con algunas cuestiones concretas, tras reconocer que no se ha acertado en solucionar el problema de la violencia de género en el medio rural.