España se une a Italia, Dubai y Malasia en alojar de forma estrategia estas plantas que «dan la posibilidad a la comunidad internacional de responder a las necesidades inmediatas tras desastres y crisis» como aseguró Cousin. La elección de Las Palmas de Gran Canaria no es casual. Su estratégica situación entre Europa y África busca abastecer a ambos continentes, especialmente la zona del Sahel.
En dichas plantas se podrá disponer de comida, tiendas de campañas, material de emergencia,etc. de forma inmediata las primeras 48 horas después de un desastre, reduciendo el tiempo de actuación. Una ayuda indispensable para evitar graves consecuencias para los seres humanos. «Esto es lo que ayuda de verdad a reducir la pérdida de vidas» aseguró Cousin.
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