No besarse: peligro de MERS

El Gobierno de Arabia Saudí informó el pasado jueves de diez fallecidos más por el coronavirus, que elevaban a 157 el número de fallecidos desde que se detectase el primer caso en septiembre de 2012. El número de personas afectadas ya supera el medio millar, en concreto se elevaba el pasado 15 de mayo a los 511 infectados.

Las autoridades planean insertar pequeñas láminas electrónicas en los cuerpos de los camellos para almacenar informaciones sobre las personas que los crían y los animales, según reveló una fuente de Sanidad, citada por la prensa local. Esta medida se produce después de que el Gobierno saudí instara a los ciudadanos a usar mascarillas limitando el contacto con los camellos, que se cree que pueden facilitar la expansión del virus.

El pasado lunes, las autoridades sanitarias saudíes culparon a las cafeterías de propagar el coronavirus por la falta de higiene.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró el miércoles que, a pesar del aumento «significativo» de los contagios, la enfermedad no se ha convertido en una emergencia sanitaria global. Los nuevos brotes detectados en Arabia Saudí preocupan especialmente de cara al mes del Ramadán , que se inicia el 28 de junio y finaliza el 28 de julio y que generará gran movimiento de peregrinos.

Arabia Saudí concentra la gran mayoría de casos del llamado Síndrome Respiratorio por Coronavirus de Oriente Medio (MERS) -conocido como coronavirus-, pero también se han dado casos en otros doce países: Estados Unidos, Egipto, Grecia, Jordania, Kuwait, Líbano, Malasia, Omán, Filipinas, Catar, Emiratos Árabes Unidos y Yemen.

Los coronavirus constituyen una familia viral que puede causar enfermedades en los seres humanos que van desde el resfriado común hasta el Síndrome Respiratorio Agudo Severo, conocido como SARS.