Marchas de ida y vuelta: entre la Semana Santa y el cine

La música cofrade y las bandas sonoras pueden llegar a compartir tantos códigos musicales que, en ocasiones, una marcha puede servir como banda sonora y viceversa. Es lo que podría llamarse como marchas de ida y vuelta, composiciones que engrandecen el patrimonio musical cofrade y amplifican su importancia a través de la gran pantalla.

Uno de los ejemplos más icónicos de esta transferencia de marchas de Semana Santa al cine es el que protagonizó La Madrugá y Alatriste. A pesar de que la película de Agustín Díaz Yanes contaba con una banda sonora propia, compuesta por Roque Baños, el director madrileño quiso contar con la marcha de Abel Moreno para la escena final, que recrea la batalla de Rocroi, para aportar solemnidad y dramatismo.

La secuencia es magistral. El Tercio Viejo de Cartagena –licencia literaria de Pérez Reverte– aguanta con estoicismo el envite de la artillería y caballería francesas. La encarnizada lucha va mermando a la tropa española, que se ve reducida a la nada. A pesar de ello, la rendición no es una opción y los pocos y malheridos soldados españoles deciden plantar cara. Las cartas ya estaban marcadas. El Tercio sabía que aquella batalla sería la última. «Cuenta lo que fuimos», dice antes de morir Eduard Fernández en el papel de Sebastián Copons a Unax Ugalde, que interpretaba a Íñigo Balboa.

La idea original contemplaba que ahí entrara la banda sonora de Roque Baños, cuyo tema principal se llamaba precisamente así, Cuenta lo que fuimos. Sin embargo, Díaz Yanes manifestó que, para aquella escena, quería «una música española cargada de sentimiento y nada mejor que la música procesional». En este sentido, «las marchas de la Semana Santa andaluza poseen un gran valor sentimental», explica el director madrileño, y fue entonces cuando se fijó en La Madrugá, de Abel Moreno.

Y no hay que abandonar la película Alatriste para observar el paso contrario, la vuelta. En cierta medida, el éxito de La Madrugá en la escena final opacó la inmensa banda sonora que Roque Baños compuso para el largometraje de Díaz Yanes. El compositor murciano, para reivindicar su obra, adaptó el tema Cuenta lo que fuimos a marcha procesional bajo el nombre de El Sepulcro, dedicada a la Hermandad del Santo Sepulcro de su Jumilla natal.

En Sevilla, esta marcha no se ha prodigado mucho. De todos modos, suele sonar tras el palio de la Virgen de Gracia y Amparo, de Los Javieres, interpretada por la Banda de Música Julián Cerdán, de Sanlúcar de Barrameda. Además, la Banda de Música de Las Cigarreras incorporó esta pieza en su repertorio el pasado año. Sin embargo, una de las bandas que más y mejor ha interpretado esta marcha es la Banda de Música Maestro Dueñas, de El Puerto de Santa María, dejando momentos inolvidables en la Semana Santa jerezana y sanluqueña.

Otro momento cumbre en estos viajes de ida y vuelta de las marchas procesionales es la adaptación que Antón García Abril realizó para la película Semana Santa de Sevilla, de Manuel Gutiérrez Aragón. Hasta siete marchas fueron adaptadas para ser interpretadas por la Orquesta Sinfónica de Londres, la segunda más antigua del mundo. Y no siete marchas cualquieras, sino auténticos himnos que forman parte del imaginario colectivo cofrade.

Gutiérrez Aragón puso banda sonora a su película con esta selección musical. Además, este largometraje marcó un antes y un después en la producción audiovisual cofrade por su gran despliegue técnico, dejando para el recuerdo de todos la excelsa e inconmensurable interpretación que la Sinfónica de Londres realizó de estas marchas.

Aunque no es muy común que esto ocurra, las marchas de Semana Santa han tenido algunas incursiones en el mundo cinematográfico y televisivo. Además de la ya mencionada de La Madrugá en Alatriste, también cabe destacar la inclusión de algunos compases de Amarguras en la mítica serie española Cuéntame cómo pasó, concretamente en el capítulo 113.

La Marcha Fúnebre de la ópera Jone, de Enrico Petrella, y más conocida en Sevilla como Ione, también ha hecho sus pinitos como banda sonora. Fue precisamente el cineasta español Pedro Almodóvar quien usó esta composición en su película Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón.

Por su parte, Jesús de las Penas estuvo a punto de ser la sintonía del NODO, el noticiero propagandístico del régimen franquista. Antonio Pantión concibió esta partitura para tal fin, pero al ver la calidad de la pieza, decidió convertirla en marcha de Semana Santa y dedicársela al titular de la Hermandad de las Penas.

Y aunque no se trate de una marcha, sí es interesante mencionar que Apple usó para su anuncio del iPhone 7 el pasodoble taurino La Virgen de la Macarena, que inspiraría a Abel Moreno a componer la célebre marcha Macarena.

Las marchas de ida y vuelta. Esa música a caballo entre la Semana Santa y el cine o la televisión que viene a confirmar que las marchas procesionales forman parte de un patrimonio cultural que trasciende a las propias cofradías.