Las anclas han arrancado en cuatro años un 20% de las praderas de posidonia de Ses Salines

La posidonia es un hábitat protegido por la Unión Europea. Y la pradera del Parque Natural de Ses Salines , donde se realizó la investigación, fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1999.

El estudio ha sido elaborado por siete biólogos marinos de la consultoría ambiental OceanSnell , que han analizado la situación de las praderas de Posidonia oceánica entre Punta Pedrera y S’Espalmador, en el área incluida en el Parque Natural de Ses Salines y en el Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) Ses Salines de Ibiza y Formentera, de la Red Natura 2000 de la UE.

El estudio compara el estado de la pradera en noviembre de 2012 con datos de 2008, cuando se llevaron a cabo, utilizando los mismos métodos que ahora, las investigaciones del proyecto BALEARES LIFE POSIDONIA financiadas por la UE y el Gobierno balear.

A lo largo de estos cuatro años la pradera se ha reducido entre un 16% en la zona que mejor ha resistido el fondeo de las embarcaciones y un 44% en la más castigada.

Se han detectado la presencia de gran cantidad de marcas de garreo de anclas de embarcaciones. «Los bloques de pradera arrancados, la distribución en manchas y la localización de las áreas de mata muerta indican que un elevado número de embarcaciones fondean en estas zonas durante la época estival», señalan los biólogos.

Los instrumentos de investigación hallaron 209 marcas de garreo sobre la posidonia, algunas de ellas de hasta 344 metros de longitud. Y se estima que el impacto directo de dichas marcas es de cerca de 11.000 m2.

«La Comisión Europea desestimó en 2012 la queja planteada por Oceana sobre la destrucción de la pradera de posidonia de Ses Salines debido a que no disponíamos de un estudio científico sistemático y global de la zona, sino solo de imágenes de lugares puntuales donde los daños eran evidentes», ha manifestado Xavier Pastor, director Ejecutivo de Oceana en Europa en un comunicado.

El portavoz de la organización internacional de conservación marina ha declarado que el objetivo de Oceana no es «entrar en polémicas con el Govern», sino colaborar para que se solucionen los problemas con «propuestas en positivo». Por ello, pide al consejero de Medio Ambiente Gabriel Company que ponga en marcha el proceso de instalación de boyas ecológicas, ya que constituyen «el único modo posible de permitir la presencia de un número controlado de embarcaciones de todas las esloras sin perjudicar a las praderas».