La economía gallega crecerá un 1,3% este año pero no recuperará tasas positivas hasta 2017

Esta es la principal conclusión que recoge el informe «A Economía Galega. Informe 2013», que la Fundación Galicia Obra Social (Afundación) presentó este miércoles, en colaboración con la nueva entidad financiera de Galicia, Abanca, bajo la coordinación de Alberto Meixide. En él, se refleja en detalle la evolución que experimentaron los diferentes sectores de la economía gallega en 2013 y en los comienzos de 2014.

Como en España, la crisis económica persistió en Galicia en 2013. Por tercer año consecutivo la tasa de variación del PIB fue negativa, en torno al 1 %, con lo que se frustró la expectativa de que 2013 fuera el año en el que se lograra el tan ansiado giro hacia tasas positivas. Cabe aguardar que este hito se produzca en 2014.

Desde la perspectiva de la producción, se constata la importante contracción de la actividad de construcción, de tal manera que su VAB (Valor Añadido Bruto) en 2013 ya era un 31,5 % inferior al de 2008. El sector primario tampoco contribuyó positivamente a la generación de PIB. Este mismo indicador en el sector de servicios, que en 2013 representaba el 63,7 % del total, descendió un 1,4 % lo que justifica, en gran parte, la caída total del PIB gallego. Por el contrario, los servicios proporcionados por las administraciones públicas mantuvieron una actividad muy similar en 2013 a la del año precedente. Cabe esperar que en 2014 los resultados del sector servicios sean más positivos y, de hecho, en el primer trimestre se registró un aumento del VAB del 1,8 %. Por su parte, la industria experimentó una recuperación en sus dos vertientes, energética y manufacturera, situación que no parece que se vaya a mantener en 2014.

En lo relativo al gasto, la demanda interna sigue siendo, como en el conjunto de España, el principal elemento explicativo de la desaceleración del PIB gallego. A eso hay que añadir, en Galicia, el impacto de la reactivación de las importaciones. En el ángulo contrario, el espectacular incremento en las exportaciones de bienes y servicios, un 11,4 %, contrarrestó el resultado del resto de variables, por lo que fue la demanda externa la dinamizadora de la actividad económica en Galicia.

Además, el patrón exportador gallego continúa diversificándose ya que se observa cómo empresas gallegas están accediendo a nuevos rincones de mercado en países de rápido crecimiento. En 2013 se alcanzó un récord en el saldo positivo de la balanza comercial: 4.066,5 millones de euros. Frente a ello, según se recoge en el análisis, la demanda interna sigue sin recuperarse el consumo de los hogares, si bien, ya desde 2012, frenó su caída la formación bruta de capital.

En esta situación, la evolución del mercado de trabajo no fue positiva. La sistemática caída de la producción en los últimos años provocó una fuerte destrucción de empleo. Desde 2007 se multiplicó por tres la tasa de paro (22,1% en 2013), en un período en el que se mantuvo estable la tasa de actividad.

En resumen, 2013 cerró con una caída en la actividad, si bien las previsiones apuntan a que en 2014 la tasa de variación del PIB gallego superará el 1%, gracias a una progresiva recuperación de la demanda interna y un relativo dinamismo en el sector exterior.