De Lara pide volcar de nuevo datos de ordenadores de la Diputación de Lugo

Según han informado fuentes de la Diputación lucense, los agentes se personaron en dependencias del órgano provincial sobre las 10.30 horas. Allí se les informó de que el volcado del ordenador de la funcionaria de la Unidad de Proyectos ya había sido realizado el pasado mes de mayo por la Policía Nacional.

El 21 de mayo, la juez de apoyo del Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, Hortensia Bouso, había desplazado a agentes policiales a la Diputación de Lugo para requerir el volcado informático de este mismo ordenador, en el marco de la investigación por el desvío de miles de euros en las obras de la piscina y el polideportivo de Monterroso .

En aquella ocasión, los agentes de la Policía Nacional habían solicitado los correos electrónicos intercambiados entre esta técnico de la Unidad de Proyectos y la empresa Construcciones Gamallo, que se encarga de las obras de la piscina de Monterroso, donde la Diputación detectó supuestas irregularidades relacionadas con las cuantías de las certificaciones, por lo que puso el caso en conocimiento de Fiscalía y se abrió la pertinente investigación.

La trabajadora de la cual se solicitó el volcado informático es la responsable directa en la Diputación de Lugo de las obras de la piscina del polideportivo de Monterroso, en las cuales el órgano provincial aporta fondos. La directora de la unidad de proyectos de la Diputación ya había sido llamada a declarar en abril como imputada por estas obras en Monterroso.

No obstante, en esta ocasión es la instructora de la «Pokemon» la que pone a esta funcionaria en el punto de mira de esta causa, que investiga una supuesta trama de sobornos de empresas a políticos a cambio de la concesión de servicios y de su renovación a lo largo de los años.

Los agentes enviados por De Lara también solicitaron el volcado informático del ordenador de un funcionario que trabajaba en el antiguo Inludes, que era un organismo autónomo dependiente de la Diputación de Lugo que quedó disuelto en enero de 2013 y todos los servicios que prestaba y su personal quedaron integrados en el órgano provincial. Así, la Diputación de Lugo informó a los agentes de esta circunstancia y se comprometió a intentar determinar cuál era el ordenador que empleaba.