El psiquiatra de Rosario Porto asegura que habló «presionado por los medios»

A su salida, el psiquiatra ha rechazado hacer declaraciones. En una declaración «bastante extensa», que se inició entorno a las 10.30 horas, Narciso Carrero «acabó reconociendo que sí hizo esas declaraciones» a pesar de que «conocía sus obligaciones y el código deontológico de los profesionales de medicina», que impide revelar datos de los pacientes, ha informado Gutiérrez Aranguren.

El abogado de Rosario Porto ha atacado este miércoles al psiquiatra Narcisco Carrero , que atendió a la madre de Asunta, por vender a su clienta como una «psicópata», alegando que tenía un «comportamiento esquizoide». Tras publicar datos sobre el estado de salud de Rosario Porto, Aranguren ha considerado estas declaraciones «malintencionadas y poco espontáneas». El letrado ha recordado que existen muestras gráficas sobradas de estas comparecencias y manifestaciones. El doctor Carrero llegó a decir que Porto era «rarecha».

Preguntado a qué se podría enfrentar Narciso Carrero, ha contestado Aranguren que a una pena de prisión baja y de no cumplimiento, pero lo importante «es que dé a mi clienta la satisfacción moral de pagar por lo que dijo indebidamente» puesto que actuó para «redondear un perfil de psicópata absolutamente injustificado» pero que «en boca de una persona experta en psiquiatría tuvo una trascendencia importante».

También ha informado de que el examen psiquiátrico forense hecho a Rosario Porto ha concluido pero todavía no existe un informe del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga).

Precisamente, uno de los análisis que debía realizar fue aplazado para que la madre de Asunta estuviese presente en Sala durante la comparecencia de varios testigos -durante las que se quedó dormida -, valiéndose de su condición de abogada para ejercer su propia defensa junto a Aranguren. Ese día, le realizaron un chequeo médico. El informe, al que tuvo acceso el «Programa de Ana Rosa», constata que padece un cuadro depresivo que no le impide estar en prisión. Ese día, en concreto, sufría un proceso gripal por el que podía ser tratada en el penal de Teixeiro.