La primera «Grossa» catalana deja 3 millones de euros en Lliçà d'Amunt

Toni López, el director del supermercado en el que se ha vendido la primera "Grossa", ha explicado que "no olvidaré nunca este número", aunque no lo llegara a comprar. En este establecimiento se han vendido 30 billetes de la serie ganadora de manera muy repartida. Los responsables del centro, al que todavía no se ha acercado ningún afortunado, han recordado que han vendido además del primer premio otros cincuenta números diferentes y que la jornada laboral de hoy, por las ventas que se esperan por Fin de Año y con este agradable "extra" de la "Grossa", acabará siendo "muy movida".

Además de la Grossa, también tienen premio los números anterior (03.472) y posterior (03.474) al afortunado, con 10.000 euros por billete, así como los boletos que acaben con las cuatro, tres, dos y última cifra del número premiado. En este caso, el premio es de con 2.500, 250, 25 y 5 euros por billete, respectivamente.

El número 77.879 ha sido agraciado con el segundo premio de la Grossa de Cap d'Any, dotado con 32.500 euros por billete, y ha sido vendido en una gasolinera de L'Escala (Girona) y en la Botiga del Cafè de Rambla Nova de Tarragona. El sorteo también ha repartido un tercer premio que ha recaído en el 88.297 dotado con 15.000 euros por billete y vendido en un estanco de Cardona y en el Gremio de Libreros de Barcelona.

A otros agraciados de la "Grossa", el sorteo les ha cogido trabajando. Como en la gasolinera de L'Escala, la cafetería de Tarragona o el estanco de Cardona, en donde Sonia, la propietaria, se ha mostrado muy sorprendida: "no me lo creo y además soy una de las ganadoras". También Marià Marín, del Gremio de Libreros, ha explicado que "la "Grossa" ha sido una locura: habitualmente no vendemos lotería pero nos han pedido muchos números".

En el año de su estreno, la «Grossa», cuyos beneficios se destinarán a fines sociales, ha vendido 25 de los 30 millones de euros emitidos en billetes y, de momento, ha servido para descartar otros sorteos que la Generalitat estudiaba realizar los días de San Juan, la Diada o Sant Jordi.