El preacuerdo en Ceiss prevé 1.230 despidos

Pese a que las negociaciones parecían encalladas y la previsión era bastante negativa, anoche Banco Ceiss aceptó la propuesta de los sindicatos UGT y Csica que prevé el despido de 1.230 trabajadores, casi 300 menos de los que se anunciaron en un principio. A la espera de que Comisiones Obreras y UEA se sumen al documento firmado anoche en Madrid, el texto rubricado incluye un total de 600 prejubilaciones, mientras que el resto serán bajas incentivadas. Además, y como ya habían propuesto los sindicatos, Banco Ceiss aceptó un expediente de regulación temporal rotatorio que afectará también a un total de 1.200 empleados. Según el preacuerdo, estas suspensiones de contrato se realizarán en turnos de seis meses en turnos de 150 trabajadores y durante cuatro años

Además, según trasladó a ABC Luis Rodríguez, representante de Csica en la entidad, el acuerdo alcanzado también, por un lado, que los trabajadores en Castilla y León no tengan que desplazarse más de 50 kilómetros de su actual puesto de trabajo, pero también supone que «muchos» de los empleados ubicados en las zonas de expansión de la entidad -Galicia, Asturias, Cataluña, Madrid,...- podrán ser «recolocados» en las zona natural de Castilla y León.

En todo caso, el propio Rodríguez aseguró que lo más importante es que «no se aplicará la reforma laboral» en la extinción de contratos y que «nadie se irá con 20 días por año trabajado». Aunque desde ambos sindicatos rechazaron que sea un pacto «para sacar pecho» y admitieron que contiene «medidas impopulares», defendieron que es «lo mejor que podíamos conseguir». Así, en el caso de las bajas incentivadas se aplicarán a los empleados de un mínimo de 56 años y de hasta año divididos en varias categorías. A nivel general recibirán entre 25.000 y 40.000 euros por año trabajado hasta los 62 o 63 años, en función de su fecha de nacimiento.

Tras la firma del preacuerdo, las dos organizaciones desconvocarán las jornadas de huelga previstas para los días 9, 10 y 13 de mayo. Las secciones de UGT y Csica también apoyan la decisión de anular las movilizaciones previstas, como las concentraciones semanales frente a las sede de León y Salamanca.