Fernando Ríos recula: «Posiblemente metí la pata con lo del nuevo impuesto»

«Posiblemente, metí la pata con lo del impuesto», reconoció en los micrófonos de esRadio en Canarias , cuando uno de los periodistas invitados le interrogó sobre el asunto. Ríos , muy activo en las redes sociales cuando se trata de la lucha contra el petróleo, admitió que a veces se mete «en charcos» y que lo dicho el miércoles no debía tomarse como un proyecto sobre el que esté trabajando el gabinete de Paulino Rivero.

«Uno se mete a veces en charcos complicados y esta fue una cuestión a título personal y sobre la marcha. Posiblemente metí la pata, fue una reflexión equivocada, pero lo único que quise fue buscar soluciones ante la pregunta de cómo se iba a financiar», expresó este viernes en una entrevista con Óscar Martín.

Ríos había justificado el coste —de medio millón de euros— de la hipotética consulta en que se trata de una cuestión central: «¿Vamos a hipotecar nuestro futuro por no gastarnos medio millón? Ya se buscarán los créditos extraordinarios para sufragar ese gasto». Y ya puesto a especular, sugirió la creación del impuesto: «Si hiciéramos otro referéndum donde se pregunte si el referéndum [de las prospecciones] se puede sufragar con un pequeño impuesto que pusiésemos a cualquier cosa, la gente diría que sí».

Cabe recordar que en el seno del Gobierno de Canarias se barajó, tras conocerse la noticia de la autorización a Repsol para explorar la zona, la posibilidad de crear un «impuesto disuasorio» a la extracción de petróleo.

En los cálculos habían llegado incluso a pensar en un número: 50 euros por barril de crudo, lo que frente a una cotización como la actual del Brent —de 109 dólares/79 euros— haría inviable el negocio. Sin embargo, estas especulaciones chocan con el hecho de que las competencias en materia de hidrocarburos son del Gobierno de España, que es el que concede los permisos de exploración y explotación.